2 J. Morán

Pravia

Ricardo Álvarez Díaz-Pire, empresario jubilado, ex concejal de Pravia y pieza clave en Asturias de la Alianza Popular -después PP- que puso en marcha su amigo Manuel Fraga, saca la cartera del bolsillo y rebusca entre numerosos papeles. Sale una foto suya de los tiempos de la mili; otra, igualmente en blanco y negro, con un grupo de amigas pravianas. Surge también una tarjeta de visita de Camilo Alonso Vega, capitán general y ministro de la Gobernación de 1957 a 1969. «Y aquí llevo un documento que es historia: el fax en el que Cascos me comunica en 1989 que Fraga le ha llamado para que sea secretario general del partido». En tal designación habían influido intensamente el propio Pire y el oftalmólogo, ya fallecido, Luis Fernández-Vega, otro de los pilares del PP asturiano. «Pensábamos en el interés para Asturias de que Paco Cascos estuviera en ese puesto», recuerda hoy Ricardo Pire, nacido en 1933, mal estudiante en el severo Colegio San Luis de Pravia y titulado después en Comercio. Con esa formación es llamado por su tío Ricardo para incorporarse a su negocio de ultramarinos y coloniales. Los progresos en dicha tarea le conducirán a ser cofundador y vocal de la central de compras IFA y a crear la cadena de supermercados Aldi en el occidente de Asturias. Fue, asimismo, concejal de Pravia, junto al alcalde Manuel López de la Torre, director del San Luis. Su entrada en la política de partido se la debe a Fraga, quien durante una de las primeras asambleas de AP, en el Palacio de Deportes de Oviedo, zanjó una discusión sobre la designación de un cargo diciendo: «Pues ahora nombro yo al escribano». El que tomaba notas de aquella reunión era precisamente Ricardo Pire, quien antes de llegar a eso había escuchado una vez a Franco decirle en Cornellana: «Los partidos políticos son artículos de lujo».

«En la política hay que tener sentido común, pero luego vienen las peleas y las pugnas por los puestos», reflexiona hoy Pire, que conoció a Francisco Álvarez-Cascos «un día que vino a Pravia, en un coche Mini Morris, para implantar el partido». De aquel joven político «tuve una impresión inmejorable, pero para seguir sus pasos, ¡manda tela...!». Años después llegó el alejamiento cuando Pire optó por Sergio Marqués a finales de los años noventa, tras el enfrentamiento de éste con el PP. El empresario praviano fue uno de los impulsores del nuevo partido de Marqués. «Cometí la torpeza de ser uno de los fundadores de URAS, que fue un desastre del que no quiero ni acordarme».

En el presente mantiene «contactos con Cascos por terceras personas y sé que él me sigue apreciando, y yo a él, pero no creo que venga como candidato a Asturias si no le dejan hacer limpieza total en el PP, una limpieza como Dios manda». En 1989 fundó, junto a su amigo Francisco Javier Fernández Casielles, la empresa Terpla, una de las más prósperas de Pravia. Ricardo Pire narra para LA NUEVA ESPAÑA sus «Memorias» en ésta y otras dos entregas.