Oviedo / Valencia,
P. Á. / Europa Press
El Gobierno regional y la Fundación Carmen y Severo Ochoa desconocían la decisión del científico Santiago Grisolía de ceder el legado musical del premio Nobel asturiano. Herminio Sastre, viceconsejero de Ciencia y Tecnología del Principado, se mostró ayer «sorprendido» por esta medida y reclamó a Grisolía que «en el futuro tenga en cuenta a Asturias a la hora de disponer del patrimonio material de Ochoa». Entre tanto, César Nombela, presidente de la Fundación Carmen y Severo Ochoa, manifestó que «en la fundación no teníamos conocimiento de la existencia de un legado musical en disposición de ser distribuido entre unos y otros».
La colección artística del bioquímico luarqués está ubicada en el Museo Casa Natal de Jovellanos, en Gijón. El resto de sus pertenencias fueron entregadas en su día por el Nobel a Grisolía, su primer becario español en Estados Unidos, quien eligió su Valencia natal para exponerlo. En aquellos momentos las autoridades asturianas no manifestaron interés oficial alguno por hacerse con el patrimonio del científico más importante en la historia de la región.
Herminio Sastre considera llegada la hora contemplar la posibilidad de que, cuando menos, una parte del patrimonio de Ochoa recale en Asturias. El Viceconsejero recordó que Grisolía fue incluido por el Principado en la comisión que organizó los actos conmemorativos del centenario del nacimiento del bioquímico luarqués, celebrado recientemente.
Personas interesadas
El acto oficial de cesión del legado musical tuvo lugar ayer en Valencia en la sede de la Fundación Premios Rey Jaime I, de la que Santiago Grisolía es presidente ejecutivo, el mismo cargo que ocupa en el Consell Valencià de Cultura. El receptor del legado fue el presidente de Unió Musical de Llíria, Vicente Alcaide. Santiago Grisolía subrayó la «importancia» de conservar la memoria de Severo Ochoa. En esta línea, explicó que la parte científica de sus documentos, trabajos o condecoraciones están expuestos en el Museo Príncipe Felipe de Valencia, mientras que la Fundación Valenciana de Estudios Avanzados acoge la colección particular de libros no científicos y otra musical y audiovisual.
El presidente de la Fundación Premios Rey Jaime I entregó a la Unió Musical de Llíria un total de 12 vinilos, entre los que figuran piezas de ópera, tangos, las «Cantatas de Santa María» del Rey Alfonso X El sabio, así como obras de los compositores Wolfgang Amadeus Mozart y Robert Schumann, e incluso un disco del Orfeón Universitario de Venezuela. Además, se entregaron también cinco cartuchos en formato magnético.
Grisolía justificó su decisión señalando que, a su juicio, la colección musical debía ser conservada «por aquellas personas que tienen interés en esta área». El científico precisó que la elección se basa en la «tradición» y el «esfuerzo privado enormemente importante» de la Banda Primitiva de Llíria y la Unió Musical de Llíria.
