Londres

Un grupo de científicos ha logrado crear un primer mapa detallado de la llamada «materia oscura» de la que está constituido básicamente el universo. Se trata de partículas que no pueden ser detectadas por la radiación que emiten y no son visibles en ninguna parte del espectro electromagnético, pero cuya existencia se infiere de los efectos gravitatorios que causa en la materia visible como estrellas o galaxias.

Los astrónomos que la estudian anuncian haber logrado la tarea que parecía imposible de crear imágenes tridimensionales de algo que se había resistido hasta ahora a todo intento de detección desde que se lanzó la hipótesis sobre su existencia, en 1933.

A diferencia de lo que ocurre con los distintos cuerpos celestes, visibles al ojo humano gracias a poderosos instrumentos de observación como los telescopios, nadie ha visto hasta ahora la materia oscura ni sabe de qué está compuesta, aunque algunos cálculos efectuados por los astrónomos indican que es al menos seis veces mayor que el resto del universo visible combinado.

Con ayuda del telescopio espacial «Hubble», un equipo de setenta astrónomos europeos, estadounidenses y japoneses ha logrado crear una imagen de la materia oscura en una región del espacio que contiene galaxias de varios miles de millones de años.

Los primeros detalles del mapa de materia oscura se revelaron el domingo pasado en la reunión anual de la Asociación Astronómica Americana, celebrada en Seattle (EE UU), y se recogen en la edición de internet de la revista científica «Nature».

Demostración

Uno de los descubrimientos más importantes de los astrónomos es que la materia oscura parece formar un armazón o esqueleto en torno al cual se constituyó el universo visible.

Aunque los cosmólogos suponían que debía ser así, el descubrimiento constituye una demostración sensacional de que sus cálculos eran correctos y de que sin materia oscura no podría existir el universo tal y como lo conocemos. El mapa se remonta a la mitad de la antigüedad del universo y muestra que la materia oscura constituyó algo así como gigantescos grumos al colapsarse bajo el peso de la gravitación. En torno a esos grumos se agrupó luego otra materia para formar las estrellas visibles, las galaxias y los planetas.

«Hemos conseguido por primera vez hacer un mapa de la distribución a gran escala de la materia oscura en el universo», afirma Richard Massey, del Instituto de Tecnología de California.

El mapa en tres dimensiones de la materia oscura se elaboró de una forma parecida a como con un escáner de tomografía puede construirse una imagen tridimensional del cuerpo humano tomando diferentes imágenes de rayos X en dos dimensiones. Ahora, el siguiente desafío es determinar en qué consiste la materia oscura y su relación con la visible.