Oviedo, Diana DÍAZ

El auditorio del Conservatorio «Eduardo Martínez Torner» acogerá, a las siete de la tarde, el acto de entrega del Premio Extraordinario a las Enseñanzas Musicales -que patrocina la Fundación Alimerka-, y de los cuatro «Ángel Muñiz Toca». Para los jóvenes instrumentistas galardonados, procedentes de Asturias y de León, este reconocimiento es un aliento para adentrarse en la vida profesional, tras catorce años de estudios oficiales de música.

El acto, de entrada libre, estará presidido por el consejero de Educación y Ciencia del Principado, José Luis Iglesias Riopedre. Como colofón, se celebrará un concierto en el que los músicos reconocidos de la promoción 2007-2008 actuarán como solistas, acompañados por la Orquesta Sinfónica del Conservatorio ovetense, dirigida por Francisco Vigil. Será el primer concierto de los jóvenes intérpretes tras licenciarse. Todos coinciden al decir que han estudiado música «para hacer disfrutar al público con su arte».

Raquel San Martín ha sido premiada por partida doble. La percusionista gijonesa ha obtenido un «Muñiz Toca» y el Premio Extraordinario. San Martín, que interpretará esta tarde al xilófono «Fantasy on Japanese Wood Prints», de Alan Hovhaness, dice que recordará su etapa en el Conservatorio superior como «un período intenso, dedicado al estudio». «Los percusionistas hemos de estudiar en el aula del centro, porque no disponemos de todos los instrumentos de la familia», explicó. La joven músico espera seguir perfeccionando su técnica en clases y haciendo «cuantos más bolos, mejor». «Dentro de un año quisiera estabilizar mi posición en una plaza pública», comentó San Martín, quien destacó, como aliciente de la carrera musical, «la posibilidad de hacer prácticas durante la etapa de estudiante». Andrés Fernández es otro de los premiados «Muñiz Toca». El oboísta ovetense quiere tomar «un soplo de aire fresco». El camino será Alemania, a través de las clases con Christoph Hartmann, de la Filarmónica de Berlín. Fernández, que tocará el «Concierto para oboe en do mayor» de Mozart, explica cómo es la lucha por salir adelante en una carrera en la que «los padres matriculan a sus hijos de pequeños, pero cuando crecen y se deciden a tirar por ella, les cuesta encontrar apoyo alrededor».

El saxo Guillermo Rodríguez decidirá si seguir estudiando en España o en Francia, «donde están los mejores profesores». El músico leonés, que tocará el «Concierto para saxo alto en mi bemol mayor» de Glazunov, resalta la actividad musical de Asturias, «de la que participamos los estudiantes». La otra premiada es la pianista leonesa Raquel Sutil, que interpretará el «Concierto para piano y orquesta n.º 2, en fa menor» de Chopin.