Oviedo, E. BOBO

Un asesino en serie que deja el zapato de su última víctima en el lugar de cada nuevo crimen, una historia ramificada y «el gusto de siempre por el lenguaje» son los ingredientes de «El derrumbe», la nueva novela del gijonés Ricardo Menéndez Salmón, que se encuentra desde ayer en las librerías. Aunque distinta de anteriores obras, un asunto sigue constante: «El mal en el mundo», que obsesiona al novelista y que entiende como «una de las primeras preguntas de la literatura». Tal cuestión lleva, según él, al miedo en que la sociedad está instalada desde el 11 de septiembre. «El miedo se ha convertido en el lugar común en que todos nos reunimos», señaló, y «además ha aparecido el miedo al miedo». La juventud -«harta de excesos»- y las relaciones con la infancia -el autor ha sido padre recientemente- son otros de los asuntos que aborda en la novela. A pesar del éxito de su anterior obra, «La ofensa», Menéndez sostiene que escribe «como si no fuera a publicar», sin pensar en el éxito editorial, sino como una «labor personal, íntima».