Oviedo, E. B. / P. R.

No hubo vuelta atrás. Los coordinadores médicos de seis centros de salud de Oviedo -La Corredoria, La Ería, Otero, el Cristo, Pumarín y Naranco- y los dos de enfermería, ratificaron ayer su dimisión en la reunión que mantuvieron con el responsable del área sanitaria de Oviedo, Florencio Fernández Ámez. Abandonan como señal de protesta ante la instrucción del Servicio de Salud del Principado de Asturias (Sespa), que establece que todos los profesionales de atención primaria de las áreas urbanas deberán realizar guardias por las tardes a partir del próximo 1 de junio.

«Era difícil reconducir la decisión», admitía ayer Elena Arias, gerente del Sespa, en declaraciones a LA NUEVA ESPAÑA. Seis meses de negociación y siete reuniones formales han concluido con varias circulares que, desde la Asociación Asturiana de Médicos de Familia, se califican de «autoritarias e imperativas». «Hoy (por ayer) en los centros de salud cunde el desánimo y la irritación», declaraba Salvador Tranche, presidente de la citada asociación.

Elena Arias insistía en la importancia de la atención primaria como eje del sistema sanitario y en la imposibilidad de garantizar una atención universal y equitativa en un horario exclusivo de 8 a 3. «Es necesario abordar esta cuestión y lo hemos intentado, sin ningún ánimo de perjudicar a nadie, de la manera más flexible posible, pero si no hay acuerdo hemos de recordar que existe una obligatoriedad legislativa, el estatuto marco, y que la instrucción del Sespa se hace para recordar a todos los centros que existe esa obligación. Y no olvidemos que las guardias ya se hacen en las áreas I, II y VI. No es una resolución coercitiva».

Pese a la conflictiva situación, Elena Arias afirma estar dispuesta a continuar dialogando. «Confío en que seamos capaces de no sacar las cosas de su contexto. Hablamos de ciudadanos que se ponen enfermos y de fondos públicos, todos tenemos la responsabilidad de que hay que cumplir la ley de Sanidad».

En el mismo sentido, se pronunciaba el consejero de Salud, durante la inauguración de un taller de Soporte Vital Básico en el Instituto Alfonso II de Oviedo. «Los médicos de atención primaria tienen obligación legal de hacer guardias en zona urbana, igual que en las zonas rurales. El Sespa está recordando esta obligación, que está en el estatuto marco», declaró Ramón Quirós.

Quirós explicó, asimismo, la necesidad de regulación de esa atención continuada y adelantó que existe un «primer borrador y un cronograma que habrá que pactar con gerencia para su puesta en marcha en las próximas semanas» para cubrir las necesidades hasta las 20 horas.

El Consejero destacó el esfuerzo organizativo que se está llevando a cabo por parte del Sespa para reconducir la situación. «Lo que hay en estos momentos es una instrucción a los gerentes, por parte de la dirección de atención sanitaria, que se pasó el mismo día que se alcanzó el preacuerdo de la retribución de las guardias con el Sindicato Médico. Ahí se dice que hay que empezar a organizar las guardias, otra cosa es cuándo se ponen en práctica», señaló.

El Sespa se reunirá mañana con los sindicatos para hablar de las guardias. Carlos Fernández Moro, portavoz del Sindicato Médico, afirma que el horario de 8 a 3 «es sagrado» e innegociable. «Si es necesario que los centros de salud pasen consulta por la tarde, que hagan nuevas contrataciones o que incentiven a médicos voluntarios. No podemos colaborar con la Administración en echar compañeros al paro; en estos momentos hay 99 interinos en el servicio de atención continuada que no sabemos qué va a pasar con ellos», declaró.

Por otra parte, Comisiones Obreras denunció ayer contradicciones en las negociaciones sobre las consultas de tarde y la realización de guardias, de las que responsabiliza a Ramón Quirós y a Elena Arias. En su opinión, la mesa de negociación constituida este año para tratar ambos asuntos sirve para la organización de la atención continuada (guardias) y de las urgencias o emergencias, pero no tiene «nada que ver» con la «tan discutida consulta de tarde». El sindicato añade que en el preacuerdo firmado entre el Sespa y el SIMPA el pasado 30 de abril se asegura el precio de la hora de la jornada de guardia pero no cuestiones referentes a la organización del personal.