Rector de la Universidad de Oviedo

Oviedo, Eduardo GARCÍA

-¿Cuál es su máxima inquietud con vistas al nuevo curso?

-La economía. Tenemos la obligación de potenciar la investigación, pero el Principado no nos puede ayudar más. Tenemos, entre otras cosas, un sustancial déficit de técnicos especializados; es muy triste contar con aparatos que cuestan un millón de euros y a los que no se les saca toda la rentabilidad, precisamente, por la falta de esos técnicos. El presupuesto del vicerrectorado de Infraestructuras se reduce a cero patatero.

Vicente Gotor, rector de la Universidad de Oviedo, presentó anteayer el plan estratégico del Campus de Excelencia Universitaria, un documento que perfila la Universidad asturiana del futuro, tanto en equipamientos como en áreas de conocimiento. Un proyecto que será sometido a la evaluación de la Administración central y del que dependen decenas de millones de euros en subvenciones de aquí al 2012. La Universidad de Oviedo afronta su primer año de Bolonia, aunque los Estudios Europeos se reduzcan en este curso a doce grados.

-¿Un curso con menos alumnos?

-Puede que no. A día de hoy llevamos unas 80 matrículas más que el año pasado. A ver qué pasa en las próximas semanas. Pero a mí el número total de alumnos me preocupa menos que la falta de matrícula en algunas carreras. Puede haber titulaciones que a corto plazo desaparezcan.

-¿En Humanidades?

-No concreto, no tiene sentido. Con el nuevo marco de Bolonia, dentro de unos pocos años todos los grados van a ser evaluados por la ANECA. Si prevés 25 alumnos por curso y resulta que sólo tienes 10 y esa situación se mantiene en el tiempo, los informes van a ser negativos. Las cosas han cambiado: cuando había 40.000 alumnos, se llenaban las clases; ahora tenemos casi la mitad y hay quien se queda con poca matrícula.

-¿Prevé una futura titulación única en Humanidades?

-Es una idea que ya expresé en alguna ocasión. Lo que veo difícil es mantener doce titulaciones, y eso que el Rectorado ha sido muy generoso en este aspecto; hemos defendido titulaciones que es evidente que no son rentables. Pero no todo se puede plantear en términos de rentabilidad.

-No sé si en estas circunstancias es oportuno hablar de nuevas titulaciones.

-Lo haremos a partir de enero. Hay que ver cómo está el mercado, qué demanda hay y con qué recursos humanos podemos contar. Se habla de Periodismo y de Arquitectura, pero me pregunto si de verdad existe demanda suficiente para mantener esas titulaciones en Asturias. Traducción e Interpretación sí tiene demanda segura y costaría poco ponerla en marcha. A Mieres le tenemos que dar un contenido: sedes departamentales, un instituto de investigación, nuevas titulaciones...

-¿Cómo afronta el primer año de Bolonia?

-Creo que podremos adaptarnos bien, pero el año que viene, cuando comiencen a funcionar todos los grados, vamos a necesitar profesorado.

-¿Lo tiene cuantificado?

-Entre 50 y 60 profesores más por curso durante algunos años. Este año, a causa de la crisis, no hemos podido sacar ni una sola plaza docente nueva.

-Pues de la Universidad se marchan más bien pocos...

-Ahora se han jubilado medio centenar. Alguno quiere continuar con su despacho y eso es un problema. Se jubilan cobrando todo el sueldo hasta los 70 años. Hay áreas de docencia e investigación en nuestra Universidad que es necesario rejuvenecer. En otras, sin embargo, la juventud de los docentes y su capacidad, por ejemplo, para dar clase en inglés, abre mejores perspectivas.

-¿Cuántos profesores de la Universidad no dan una sola clase en todo el curso?

-Espero que ninguno, salvo años sabáticos y bajas. De dar clase no se libra ni el rector.

-¿Hay áreas donde sobran profesores?

-Sí. Hay profesores que a igualdad de sueldo dan la mitad de clases que otros.

-En este entorno de crisis, ¿no resulta paradójico incluir en el plan estratégico esa ordenación brutal de facultades y escuelas en los distintos campus de Oviedo?

-Es que no es ni mucho menos lo más importante del plan. Hasta el año 2012 tenemos claras las prioridades, y éstas se centran en la investigación y desarrollo, en las dos áreas de Biomedicina y Salud, y de Energías Alternativas, Medio Ambiente y Cambio Climático, donde hay grupos de investigación e interés empresarial muy importantes. Lo de los edificios es a largo plazo, no menos de diez años. Pero era hora de hablar del futuro, y nuestra propuesta es racional.

-Cuarenta másteres oferta de la Universidad. ¿Son muchos?

-Hay que ser más selectivos. No más de treinta sería un número ideal. El que no alcance las diez matrículas se cae. Ahí seremos inflexibles.