Oviedo, P. Á.

Un juez ovetense ha exculpado a cuatro ex directivos del Hospital Central de Asturias de acoso laboral a una médica del servicio de Medicina Nuclear. La sentencia incluye varias consideraciones muy duras con la denunciante, a la que impone el pago de las costas porque el magistrado estima que «la conducta de la acusación particular sin duda debe ser calificada como temeraria».

La demanda solicitaba para los acusados siete años de cárcel y el pago de una indemnización de dos millones de euros. La denuncia había sido formalizada por Carmen Fernández García-Gudín, médica adjunta del mencionado servicio desde 1980. Los denunciados eran el ex gerente del Central Abelardo Román, la ex directora médica Matilde Roza, el ex subdirector médico José Astudillo, y la ex jefa del servicio de Medicina Nuclear Carmen Roiz.

García-Gudín acusaba a los cuatro de «un delito continuado de lesiones y de un delito continuado contra la integridad moral», señala en la sentencia el magistrado Francisco Javier Iriarte Ruiz, titular del Juzgado de lo Penal número 4 de Oviedo. Los denunciados fueron defendidos por el abogado Pablo González López, quien actuó como apoderado del Servicio de Salud del Principado (Sespa).

La resolución no considera acreditado que la conducta de los acusados tenga relación alguna con el «trastorno adaptativo mixto, distimia y trastorno depresivo mayor y de ansiedad generalizada» que tiene diagnosticados la denunciante. Asimismo, indica que los hechos que refiere la denuncia «no resisten un análisis crítico, lo que redunda en una escasa verosimilitud de la acusación».

Acusación

La denunciante solicitó la condena de Matilde Roza, Carmen Roiz Gaztelu, José Astudillo y Abelardo Román como autores de un delito continuado de lesiones y de un delito continuado contra la integridad moral. Pedía para ellos tres años de prisión por el primer delito y cuatro años de prisión e inhabilitación especial para todo oficio y cargo público durante cuatro años por el segundo. Solicitó igualmente una indemnización de dos millones de euros.

Sentencia

«No ha quedado acreditado que [los acusados] hubieran infligido a doña Carmen Fernández García-Gudín un trato degradante o que hubieran atentado contra su integridad moral, ni que por ello sean los causantes del trastorno adaptativo mixto, distimia y trastorno depresivo mayor y de ansiedad generalizada que tiene diagnosticados la señora Fernández García-Gudín».