Oviedo, M. S. MARQUÉS

El «Boletín Oficial del Principado de Asturias» (BOPA) publicó ayer la convocatoria para la provisión de la plaza de director del Museo Arqueológico de Asturias, dependiente de la Dirección General de Patrimonio de la Consejería de Cultura.

La plaza será cubierta por el sistema de libre designación y a dicho puesto podrán presentarse los funcionarios de carrera de la Administración del Principado de Asturias, de otras comunidades autónomas o de la Administración del Estado y que pertenezcan al grupo A.

Los interesados deberán presentar las solicitudes dentro del plazo de los veinte días hábiles siguientes al de la publicación en el BOPA de la resolución. Para ello deberán hacer constar en la solicitud la plaza de la que son titulares en la Administración, así como los títulos académicos que poseen, con especial atención a los relacionados con el puesto a desempeñar.

El Museo Arqueológico de Asturias se encuentra en la actualidad en proceso de ampliación. Se está desarrollando el plan museográfico adjudicado el pasado mes de noviembre a una unión temporal de empresas.

El proyecto de contenidos de la exposición permanente ha sido coordinado por la catedrática de Prehistoria de la Universidad Autónoma de Madrid, la asturiana Carmen Fernández Ochoa, una de las profesionales que desde la Consejería de Cultura sería bien vista para ocupar la dirección del museo, aunque la profesora ha optado siempre por seguir al frente de su cátedra en Madrid. Otro de los expertos asturianos en cuyas manos el Principado estaría dispuesto a dejar el Museo Arqueológico es el profesor de Prehistoria de la Universidad de Oviedo, y hasta el pasado año director general de Patrimonio, Adolfo Rodríguez Asensio. En ambos casos parecen ser las trabas burocráticas de la Administración las que entorpecen notablemente las posibilidades de que los profesores opten al puesto convocado. En esta situación, la consejera de Cultura, Mercedes Álvarez, se verá obligada a elegir entre una nómina de expertos muy menguada, ya que en Asturias son pocos los arqueólogos que cuentan con la categoría exigida de funcionarios necesaria para poder optar a la dirección del museo.

El nombramiento de director es esencial para la coordinación de los planes de actuación que afectan a tres áreas cruciales a la hora de poner en marcha un museo: área administrativa, área científico-técnica y área de difusión y comunicación. Algunos expertos consideran que el futuro director debería estar ya trabajando con las personas que se ocupan del proyecto de contenidos y de la instalación de los mismos.

El Museo Arqueológico se abrió por primera vez al público en el antiguo monasterio de San Vicente en el año 1952 y bajo la dirección de Manuel Jorge Aragoneses. En esta nueva etapa doblará el espacio expositivo anterior.