Oviedo, Pablo ÁLVAREZ

El Servicio de Salud del Principado (Sespa) tiene previsto concentrar la atención a las urgencias de atención primaria en algunos centros de salud. Éste es uno de los epígrafes más controvertidos de la nueva propuesta reorganizativa que la Administración ha remitido a UGT y Comisiones Obreras, que hoy comenzará a ser negociada de modo formal.

La supresión de servicios de urgencias afectaría al ámbito urbano de todas las áreas sanitarias salvo las de Jarrio, Avilés y Arriondas. Abarcaría el tramo que va de ocho de la tarde a ocho de la mañana en días laborables y las 24 horas de los sábados, domingos y festivos. El Sespa argumenta esta medida apelando a «un uso más racional de los recursos» y considera factible implantarla «garantizando en todo caso la accesibilidad de la ciudadanía».

La reestructuración de la atención continuada ya provocó en marzo del año pasado una huelga de médicos en los servicios de urgencias hospitalarias. Impulsado por el Sindicato Médico de Asturias (SIMPA), el paro, de una semana de duración, apenas tuvo repercusiones. En aquel momento el Sespa -que subrayó por activa y por pasiva que no había puesto sobre la mesa planteamiento alguno- frenó una nueva convocatoria ofertando la apertura de una mesa técnica de diálogo.

Este acuerdo fue rechazado por UGT y Comisiones Obreras, cuyos responsables enfatizaron que sólo estas organizaciones, en su calidad de firmantes del acuerdo sobre la reforma sanitaria suscrito el 8 de octubre de 2008, contaban con la «legitimidad necesaria» para formar parte de la comisión de seguimiento de este acuerdo, que daba luz verde a la reorganización de los centros de salud y estipulaba la reordenación de los servicios de atención urgente.

El tira y afloja sindical rebrotó ayer mismo con un comunicado público en el que el Sindicato Médico de Asturias (SIMPA) afirma que no ha recibido el documento del Sespa, denuncia que la citada mesa técnica no ha sido convocada en los últimos ocho meses, exige su «inmediata convocatoria» y amenaza con nuevas «movilizaciones» si la Administración «persevera en sus incumplimientos».

La nueva propuesta del Sespa establece que la atención continuada en el ámbito urbano será realizada «en régimen de guardia de presencia física», y precisa que los profesionales de los equipos de primaria deberán cubrir, «como mínimo», el tramo que va de las tres a las ocho de la tarde en los días laborables, cuestión esta que tiempo atrás causó una relevante polémica.

En el medio rural el documento recoge tres modalidades de guardia: presencia física, localización rápida y guardia mixta. La transformación de guardias de presencia física en guardias localizadas ya ocasionó en su día protestas por parte del SIMPA, pues la remuneración de estas últimas es inferior. Un aspecto novedoso de la nueva oferta del Sespa es la idea de homogeneizar las distintas categorías profesionales existentes en la actualidad. Tanto las plazas de los servicios de atención continuada (SAC) como de los servicios de urgencia de atención primaria (SUAP) serán transformadas de forma progresiva en plazas de médico y de enfermero de área «con idénticas retribruciones y jornada».