Oviedo, E. F.-P.

El Instituto Tecnológico de Massachusetts creó el año pasado, en cuanto el equipo de investigación en el que está integrado Amador Menéndez diseñó el primer prototipo de concentrador luminiscentes, una «spin off» vinculada al proyecto, es decir, una especie de empresa «incubadora» que explotará la idea y facilitará su lanzamiento al mercado. Aquel primer prototipo no resultó pero la investigación siguió adelante, hasta fructificar. Ahora, el químico asturiano estima que esta tecnología estará en el mercado dentro de tres años.

Este avance es fruto de la coordinación de un equipo multidisciplinar, en el que además de Amador Menéndez, participan científicos de Holanda, Estados Unidos, China, Israel y Australia. Menéndez, que estudió en la Universidad de Oviedo y trabajó para el Consejo Superior de Investigaciones (CSIC), tiene una larga y brillante trayectoria investigadora que el año pasado le valió el Premio Europeo de Divulgación Científica por un trabajo sobre nanotecnología.