Oviedo, P. RUBIERA

-Es una novela para epatar al burgués.

-No me interesa mucho el burgués.

Carmen Bobes, catedrática emérita de la Universidad de Oviedo y presidenta del jurado del premio «Asturias» de novela que concede la Fundación Dolores Medio, es la autora de la primera frase. La respuesta es de la escritora Carmen Gómez Ojea, autora de «El monte de la calavera», la novela ganadora.

La presentación de la obra se convirtió ayer en una interesante puesta en escena del misterio de la literatura. Carmen Bobes aportó su visión de la obra como lectora crítica y especialista. Carmen Gómez Ojea explicó el punto de vista de la autora. Algunos de los miembros del jurado, que ya conocían el texto, comprobaron, con sorpresa, cómo una y otra hablaban de aspectos de la historia que a algunos les habían pasado desapercibidos.

«La novela se puede presentar bajo dos coordenadas. Es una novela sobre la guerra; aunque no hay batallas, ni muertos, es una guerra a lo lejos. Y es una novela de Carmen Gómez Ojea», afirmó Carmen Bobes.

Y añadió: «Nos cuenta la historia de una criadita que llega al segundo piso de una casa, que puede estar situada en Gijón, a servir a una buena familia, de izquierdas, muy bien tratada. El matrimonio, cuando las cosas se complican, debe irse y la dejan a ella en el piso, con dinero. Un día conoce a un señorito del primer piso, de una familia malísima de derechas, que la pide en matrimonio, y se casa con él».

El argumento se complica, por supuesto. Para la autora «es la historia de tres mujeres con muchas historias cruzadas, aunque la protagonista es la niña aldeana que debe ir a servir con 12 años y es apartada de la escuela, en la que descubre la lectura y a Lorca. No crece y cuando es adulta se siente como una mujer derrotada, despojada».

Las otras dos mujeres son las hijas de la protagonista: la nacida de su matrimonio con el señorito, a la que prácticamente secuestra y educa su malvada abuela paterna -el padre muere pronto-, que se convierte en monja, y la nacida de otra relación de su madre.

Carmen Bobes atribuye a Gómez Ojea un estilo propio, tanto en la elección de la historia como en la estructura. «Entresaca como si fuera de un arcón, empieza y termina por donde ella quiere».

La catedrática se declaró «lectora sorprendida» cada vez que lee una de la historias de Gómez Ojea. «Siempre se sale de lo que es esperable y obliga al lector a una lectura desasosegada, ansiosa».

Según su opinión, las novelas nos ponen sobre aviso acerca de los problemas, y desde una visión ética «El monte de la calavera» es «muy inquietante, agresiva contra una forma de ver la vida, con hechos que me llenan de estupor».

Carmen Gómez Ojea es una escritora de personalidad rotunda que imprime a sus historias un lenguaje rico y culto. «El monte de la calavera» es una historia tierna y dura, que deja un poso de amargura. Ella misma decía ayer que, aunque breve, «no es de fácil lectura, exige atención». Y añadía: «Cada uno encuentra lo que quiere encontrar».

El premio «Asturias» de novela está dotado con 3.000 euros y la edición de la obra, a cargo de KRK. A la presentación asistió la consejera de Cultura, Mercedes Álvarez, quien destacó la personalidad tanto de la ganadora como de la crítica literaria.

El escritor Víctor Alperi, presidente de la Fundación Dolores Medio, destacó la condición de «novelista fundamental» y «articulista con voz propia y original» de Carmen Gómez Ojea, colaboradora habitual de LA NUEVA ESPAÑA. «Nunca miente en sus trabajos periodísticos, y en sus novelas la mentira de la creación tiene la dignidad del gran arte».

Alperi destacó, además, la pasión de Gómez Ojea por la gastronomía, como lo demuestra una de sus obras recientes, «Platos ricos para pobres». El escritor alabó la personalidad rebelde de la autora y la ubicó literariamente en el tronco común de Emily, «la más inquieta y apasionada de las hermanas Brontë, que, desde sus "Cumbres borrascosas" parece que nos llama, que lanza un mensaje necesario contra el conformismo actual».

Carmen Gómez Ojea reúne ya varios premios literarios, entre ellos, el «Tigre Juan» de 1981, por «Otras mujeres y Flavia; el «Nadal» en el mismo año, por «Cantiga de agüero», y el de la crítica por «Bailaremos en el río» en 2005, editado por Edebé.

Al acto asistieron también los miembros del jurado que decidió el galardón y Carmen Ruiz-Tilve, cronista oficial de Oviedo, catedrática, novelista y biógrafa de Dolores Medio, la autora de «Nosotros, los Rivero», «aquella mujer menuda y vivaz cuyo recuerdo, aunque murió hace 15 años, es fresco y está extendido entre lectores y estudiosos», en palabras de Mercedes Álvarez.