El blanco, el cuero, los pétalos de rosas rojas, las plumas, la pedrería y los bordados son los materiales que acompañarán a la novia la temporada 2011 en el momento de decir el "sí quiero", según se está viendo en Cibeles Madrid Novia.

Con la colección "Dreams and Roses" y, en concreto, con un vestido elaborado con más de diez mil pétalos de rosa roja, el alicantino Hannibal Laguna ha querido mostrar lo efímero y lo trascendente que resulta un vestido de novia.

"Efímero porque la novia solo lo disfruta durante unas horas y trascendente porque con él arranca una nueva vida, un proyecto lleno de pasión, sentimiento que he querido representar con el color rojo", dice el diseñador.

De las manos de Laguna surgen vestidos etéreos, ligeros y muy vaporosos realizados en "una seda vaporizada", lo que le permite amplios volúmenes y sofisticados perfiles.

La diseñadora cordobesa Ana Torres se ha encargado de abrir la octava edición con una colección romántica, adornada con aplicaciones florales y delicados volantes.

Charo Peres ha presentando una colección vanguardista con un material inédito en la moda nupcial: el cuero mate, que lo combina con pedrería y delicadas plumas y volantes . "La novia de hoy es muy exigente, pide diseños que huyan de los típicos vestidos de princesa", expresa la diseñadora.

Libélulas revoloteando sobre flores bordadas con hilo de plata y enriquecidas con cristales realzan los escotes y las colas de la colección de Peres.

Como diosas egipcias se han exhibido las novias de la bilbaína Isabel Zarpardier. Vestidos de línea tubular con abundantes plisados y drapeados, que hacían un guiño a la estética de los años cincuenta.

"He querido recuperar los bordados a mano, la pasamanería antigua y el encaje de chantilly con hebras de plata y nácar para crear diseños tan etéreos como fabulosos", dice Zarpardier.

Fiel a su trayectoria, Javier Larraínzar propone vestidos de novia con escotes cruzados, espaldas y cinturas marcadas en tejidos nobles y con exquisitos detalles de encaje.

"¿Qué sería de la novia sin el novio?" se pregunta Devota y Lomba que apuesta por trajes de líneas muy depuradas, realizados en tejidos tecnológicos. "El negro y los tonos oscuros son los más elegantes y los que marcan el buen gusto en el vestir", dice.

Sin embargo, Duyos se decanta por una gama cromática más amplia y por patrones mas atrevidos y trasgresores, con los que la chaqueta se presenta mucho más corta.

Cibeles Madrid Novias también descubre las últimas tendencias de vestidos de fiesta para las invitadas, que sin ser la protagonista de la boda, "no quiere pasar inadvertida y apuesta por diseños elegantes y sofisticados en tonos luminosos", explica Rafael Urquiza.

Diseñador que apuesta por siluetas con cintura muy pronunciadas, hombros estructurados y volúmenes a base de drapeados y abullonados en sedas y rasos de seda teñidas en oro viejo, turquesa, rubí y azabache.

"La niña de comunión es una novia en pequeño", dice Francisco Martínez Lajain, responsable de la empresa Marla Española.

"Los fajines de colores, los lazos zapateros, las jaretas y los bordados florales son los elementos que diferencian un traje de comunión de boda", explica Martínez.

Arrasan las diademas y tiaras infantiles, complemento que convierten a la niña de comunión en "princesa por un días", afirma Teresa Martínez.

La tradición manda que lo niños vistan de almirante o marinero para recibir su primera comunión y la moda "así lo acata", cuenta Ferando Ángel, administrador de Creaciones Man-fe.

Hasta el próximo sábado la mayor parte de los creadores y firmas de prestigio especializados en moda nupcial y diseños de comunión presentan las últimas novedades en Cibeles Madrid Novias.