La cornada a Julio Aparicio en el cuello puso nombre a la tarde, hoy en Las Ventas, aunque el propio médico, Máximo García Padrós, se encargaría de desdramatizar la situación: "No tenemos por qué temer ni por su vida, ni por posibles secuelas, aunque tendrá una recuperación muy lenta".

"Es una cornada muy seria. Le ha roto prácticamente toda la boca, la lengua, el paladar y el maxilar superior. Le hemos entubado en la enfermería y hemos conseguido estabilizarlo. Ahora en el hospital 12 de Octubre tendrán que seguir con la intervención y ver hasta dónde llega la fractura del maxilar. Aún es pronto para hacer valoraciones más concisas. Hay que esperar", dijo Padrós.

En lo positivo, el otro protagonista de la tarde, Manuel Jesús "El Cid", que cortó una oreja del último toro del festejo, un triunfo que le da "mucha moral" para el devenir de su temporada. Lo más importante fue "reencontrarme con mi toreo y ver una vez más al público de Madrid entregado conmigo", dijo.

"Por lo pronto ha sido la tarde más importante de mi temporada. He conseguido levantar vuelo, que es lo que más necesitaba en estos momentos, y más hacerlo en Madrid, la plaza que tanto me ha dado en mi carrera", enfatizó "El Cid".

Esta actuación de "El Cid", tercera en su haber en este San Isidro al entrar a última hora sustituyendo a José María Manzanares, había despertado mucha polémica entre aficionados y profesionales, que se cuestionaban los méritos del sevillano en sus dos tardes anteriores para que la empresa le hubiera dado esta sustitución.

Y al respecto, "El Cid" zanjó: "Es verdad que algunos decían que no me la merecía, y otros que sí. En mi opinión creo que esta sustitución me la había ganado a pulso y afortunadamente ha salido este último buen toro de Juan Pedro, al que he cuajado bastante bien".

La coincidencia además, que este toro al que "El Cid" le cortó la oreja, era el segundo del lote de Aparicio, "amigo" del de Salteras, al que además brindó la faena.

"Ha sido para mí algo muy especial. Era el toro de Julio, y por eso se lo brindé. Es un gran torero y un gran amigo, se lo merece todo. Y lo que son las cosas. Las luces y las sombras de esta profesión. Este triunfo va por él", dijo finalmente el sevillano.

Por su parte, "Morante de la Puebla" no tuvo toros propicios para corresponder a tanta expectación que siempre genera cuando se anuncia en Las Ventas.

"Indudablemente los toros no han tenido esa lucidez y esa bravura que uno necesita para poderse sentir. El quinto parecía que iba a ir a más pero ha sido todo lo contrario, le ha faltado nobleza y moverse mejor", afirmó el de La Puebla.

Lo único bueno, muy bueno, de su actuación, el impecable manejo del capote: "He hecho un esfuerzo tremendo para al menos dejarme ver, porque sé que Madrid me está esperando, y la verdad yo estoy deseando triunfar de una forma rotunda aquí", finalizó "Morante".