Barcelona, Efe

La consejera de Salud de Cataluña, Marina Geli, afirmó ayer que su departamento está estudiando implantar el uso de una píldora que «podría ser útil, segura y eficaz» para la interrupción voluntaria de los embarazos «con menos de siete semanas» de gestación.

Geli declaró a los medios que esa medicación cumpliría con los «supuestos» establecidos por la ley y apuntó que la Consejería se plantea su utilización «a partir, probablemente, de 2011». No obstante, precisó, «no hay ninguna decisión tomada» al respecto.

La consejera de Salud señaló que los responsables de la estrategia materno infantil de su departamento están «revisando los modelos internacionales» en cuanto a procedimientos abortivos y también que se están valorando las estrategias seguidas por países como Francia, Suecia y Australia.

«Cataluña quizá pueda volver a situarse en ese contexto internacional», afirmó Geli, quien agregó que aunque «hay unas reglas generales en el contexto español, el modelo de aplicación» de la ley que regula la interrupción voluntaria del embarazo depende de la Generalitat. La máxima responsable del área de salud del Gobierno catalán indicó que hay «algunos elementos muy técnicos» que todavía se están analizando, como el hecho de que esta medicación sea por el momento de «uso hospitalario».

Geli enfatizó, asimismo, la «gran importancia» que su departamento otorga a la «estrategia sobre cómo prevenir los embarazos no deseados» y afirmó que se continúa analizando el modo de «mejorar los sistemas anticonceptivos».