Oviedo, P. RUBIERA

Carmen de la Campa, asturiana de Avilés, mujer culta y viajera, presenta hoy en la Biblioteca de Candás «La mar de historias», editado por KRK (20 horas). El libro, que empezó siendo un artículo para LA NUEVA ESPAÑA y pudo ser una novela histórica, ha terminado siendo un conjunto de historias con sabor a leyenda y mitología, escritas en romance, género que a la autora le pareció el más atractivo y sencillo para lo que quería contar.

De la Campa, que se define como una «escritora ociosa y testimonial de los viajes que hago, de los sitios por los que paso y de mi infancia», presenta el libro en Candás porque la localidad marinera es el escenario en el que transcurre «La mar de historias». «Estuve allí el verano pasado, visite el Museo Antón, que me parece que está poco promocionado, y vi en el exterior una pieza muy grande de hierro que me recordó al esqueleto de una ballena. Una imagen muy simbólica para un proyecto colectivo, en el que no pierdo de vista hechos como el fusilamiento de Antón o la historia conservera de la localidad», explica.

Dos eruditos ovetenses encuentran en un monasterio asturiano un manuscrito que habla de un animal muy grande y desconocido. Ése es el origen de la historia. «Empecé a darle vueltas y pensé que el animal podía ser una ballena, y en Candás se capturaba. Además, la leyenda del Cristo dice que salieron unos marineros a pescar una ballena y no la encontraron, pero hallaron la imagen del Cristo. Lo que sí es curioso es que los ilustrados defendían el culto a este Cristo antes que el de la Virgen de Covadonga, porque encontraban que se apoyaba más en un hecho real», destaca Carmen de la Campa.

Todas estas historias dan pie a la autora para hablar, entre otras cosas, de artes de pesca, de mitología local, de sirenas -el capitán del barco está enamorado de una- y de la Santa Compaña. La escritora afirma que eligió la estructura del romance, una fórmula muy parecida a la canción, «porque es sencilla y porque una historia legendaria exige fórmulas de la época legendaria».

El trabajo de su marido la ha llevado a destinos como Nueva York, Londres y Hong Kong, y la estancia en esas ciudades la ha empujado a viajar a países como China y Tailandia o los de Centroamérica. En otoño el nuevo destino de la pareja será India.

Lectora siempre, amante de las tertulias -tiene una en el Café Central de Madrid- y escritora en muchas ocasiones, Carmen de la Campa publicó en LA NUEVA ESPAÑA una espléndida serie de artículos desde Londres que más tarde se recogieron en el libro «Al norte del Cabo Peñas», editado por Alvizoras. También publicó en este mismo diario, en el verano de 2001, una serie que tituló «Descenso a pie sobre el Nalón». En su ordenador guarda originales sobre Madrid, un libro de viajes prácticamente terminado y un proyecto de cuentos fantasmas.

«Pertenezco a una generación ilustrada, la de la transición, que vivimos en un país completamente diferente del de ahora, casi de otro siglo. Gente que probablemente seremos personajes interesantes de contar cuando hayamos muerto. Y lo único que pretendo es ser una buena ciudadana, no una escritora famosa», subraya.