Oviedo / Madrid,
P. G. / Agencias
Los pianistas asturianos Juan Barahona y Noelia Fernández recibieron ayer en Madrid, de manos de la Reina, los galardones que los reconocen como los mejores en sus respectivas cátedras de Piano, dentro de la Escuela Superior de Música Reina Sofía. En el acto, celebrado en el palacio real de El Pardo, el maestro Zubin Metha recogió el premio «Yehudi Menuhin» a la integración de las artes y la educación.
El premio «Yehudi Menuhin», concedido por la Fundación Albéniz, reconoce la labor de todos aquellos artistas, compositores e intérpretes de cualquier país «que a la vez son maestros sobresalientes y destacan en el ejercicio de la formación musical de las nuevas generaciones». Jóvenes músicos como Fernández o Barahona, que el próximo lunes interpretarán, junto a otros dos compañeros y la Orquesta Sinfónica del Principado de Asturias (OSPA), el concierto del «Día europeo de la música».
Doña Sofía entregó también los diplomas al resto de alumnos más destacados en cada cátedra de la escuela y condecoró con las medallas del centro a dos de sus patronos, mecenas de música de cámara: el presidente de la Fundación Orange, Alberto Salazar-Simpson, y el director gerente de Canon España, Emilio Novo. La entrega concluyó con un concierto de la orquesta de cámara de la propia escuela. Bajo la dirección de Gilbert Varga y acompañada por el pianista David Kadouch, la formación interpretó la obertura de «Los esclavos felices», de Arriaga, y el «Concierto para piano y orquesta n.º 2» de Mendelssohn-Bartholdy.
La Escuela Superior de Música, dirigida por Paloma O'Shea y cuya presidenta de honor es la Reina, es uno de los cuatro programas a través de los cuales la Fundación Albéniz desarrolla su actividad.
