Oviedo, E. G.

«Historia de un amor», el famoso bolero, sonó anoche en el paraninfo de la Universidad de Oviedo tocado por el músico panameño Danilo Pérez, una de las grandes referencias del jazz latino, y uno de los cinco galardonados en la I edición de los Premios Iberoamericanos de la Asociación Iberoamericana de la Comunicación Asicom 2010 en un acto solemne.

«Historia de un amor» por la música, en su caso; por el periodismo, como proclamaron otros dos de los premiados, Graciano García y el mexicano Jacobo Zabludovsky; por la comunicación, en el caso del teórico brasileño José Marqués de Melo, y por la lengua castellana, reconocido en el director de la Real Academia, Víctor García de la Concha, único ausente en la ceremonia presidida por el rector de la Universidad, Vicente Gotor.

Fue un lujo escuchar al piano a Danilo Pérez, quien vivió una semana gloriosa «por este premio y por el nacimiento de un hijo varón hace dos días», pero también al director emérito de la Fundación Príncipe de Asturias, Graciano García: «El periodismo verdadero, riguroso, comprometido, honrado y fiable no se va a acabar nunca».

El acto sirvió para presentar las cátedras Asicom-Universidad de Oviedo de Teoría de la Comunicación, promovidas por el director del periódico mexicano «El Universal», Juan Francisco Ealy, y de Redes Sociales, que patrocinan Marcos y Stephanie Fastlicht. El presidente de Asicom, Carlos Fernández Collado enumeró las virtudes que unen a los premiados, capaces de dejar «extensa huella simbólica», cuyo trabajo «ha dado nombre y renombre a la comunidad iberoamericana», hombres «renovadores e impulsores, perseverantes y creadores incansables».

Hubo espacio para las reivindicaciones. Danilo Pérez habló de la necesidad de unirse para frenar los atentados ecológicos contra el planeta, mientras que Zabludovsky, todo un icono de la comunicación audiovisual en México, reclamó un «rescate nacional» en su país «porque el verdadero progreso no se puede generar entre la ignorancia y la exclusión». Graciano García repitió las palabras de Baumann, uno de los galardonados este año con los premios «Príncipe»: «Hemos de tener esperanza en la razón, la decencia y la conciencia humana».