Oviedo,

E. F.-P. / P. Á. / Agencias

El presidente de la Sociedad Española de Medicina Interna, Pedro Conthe, criticó ayer en Oviedo, en la presentación de su XXXI Congreso nacional, el «mal uso de los recursos sanitarios» y la «peregrinación por todos los especialistas» a la que están abocados los enfermos crónicos. Las pruebas diagnósticas se repiten innecesariamente y son consecuencia de «la mayor parte del gasto sanitario del país», sostuvo, y abogó por coordinar la gestión y abrir las vías de comunicación entre los distintos facultativos, para acabar con un sistema sanitario que tildó de «añejo».

El de la Sociedad Española de Medicina Interna se celebra, desde ayer y hasta el sábado, simultáneamente al Congreso Ibérico de Medicina Interna y al de la Sociedad Asturiana de Medicina Interna. Durante estos días pasarán por el Auditorio ovetense, según datos de la organización, alrededor de 2.100 profesionales.

Conthe anunció el desarrollo de un modelo de informe de alta hospitalaria para el paciente diabético, que resumirá la atención que ha recibido durante su ingreso y las recomendaciones que debe seguir en su domicilio. Una de cada tres personas hospitalizadas en los servicios de medicina interna, indicó, están afectadas en mayor o menor medida por esa patología, que no se detecta hasta que son ingresados por otras enfermedades.

En el transcurso de este congreso expertos de todo el país abordarán las últimas novedades en diabetes, enfermedades minoritarias e insuficiencia cardiaca. Alfonso Varela Román, jefe de la sección de cardiología del Complejo Hospitalario Universitario de Santiago de Compostela, participa hoy por la mañana en un encuentro con profesionales en el que presentará los resultados del estudio SHIFT, que abarcó sesenta y cinco países y en el que se realizó un seguimiento de dos años a más de 2.500 enfermos.

Algunas de las ponencias de ayer aludieron al clásico debate referido al lugar propio de la medicina interna, atrapada -señaló uno de los ponentes- en una especie de «sandwich» entre la medicina de familia (más generalista) y las especialidades que en las últimas décadas fueron desgajándose de la medicina interna (cardiología, neumología, neurología, endocrinología...).

Durante su intervención en el acto de inauguración, el consejero de Salud del Principado, Ramón Quirós, rompió una lanza en favor de la medicina interna al subrayar que «es la base de nuestros hospitales, especialmente de los comarcales». Quirós subrayó la necesidad de situar la medicina interna «en un lugar más relevante del que ahora tiene» y afirmó que los médicos dedicados a esta disciplina «no son especialistas de segunda, sino de primera división».