Oviedo, Pablo ÁLVAREZ

Los extremos del calendario se sitúan en el 31 de diciembre de 2010 y el verano de 2011. Entre el turrón y la playa. Las obras de construcción del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) encaran hoy el que, en teoría, debería ser el último mes de trabajos. Desde el Gobierno regional se mantiene que los plazos serán cumplidos, de manera que el nuevo recinto hospitalario estará concluido con las campanadas que marquen el inicio de 2011. Entre tanto, fuentes próximas a las empresas que desarrollan los trabajos dan por inviable este objetivo y apuntan que la conclusión de las actuaciones será una realidad a mediados del año que viene -en el mejor de los casos-, o incluso a finales del verano.

LA NUEVA ESPAÑA intentó ayer -sin éxito una vez más- conocer la postura actual de Gispasa, empresa pública que gestiona la construcción de la gran infraestructura sanitaria. Uno de los parámetros que con mayor elocuencia puede definir la situación de los trabajos es el nivel de certificación de obra. Si no surgen nuevos contratiempos, el precio del edificio ascenderá a 295,427 millones de euros, una cifra que implica un sobrecoste de 90,1 millones sobre el importe de la adjudicación y de 28,6 sobre el precio de licitación.

El plazo que fija el próximo 31 diciembre como fecha final de las obras figura en un acuerdo entre el Ejecutivo asturiano y la unión temporal de empresas (UTE) integrada por Sacyr, San José y Sánchez y Lago, encargada de la ejecución de las mismas. Dicho acuerdo fue suscrito a finales del pasado mes de julio, tras una larga negociación acerca del segundo sobrecoste de las obras del HUCA. De forma oficial, los distintos miembros del Gobierno asturiano continúan dando por buenas las fechas firmadas. Sin embargo, las constructoras ya hace largo tiempo que admiten que tal posibilidad no pasa de ser una quimera.

El pasado 1 de agosto, este periódico publicó una información según la cual las citadas empresas reconocían que los trabajos no estarían concluidos hasta la primavera de 2011 («siendo optimistas») o incluso hasta mediados de ese año. Ahora no descartan que incluso puedan prolongarse hasta julio o agosto. Es previsible que, en los próximos días, el Gobierno de Vicente Álvarez Areces se vea obligado a pronunciarse, ya que -al menos sobre el papel- los acuerdos vigentes con las empresas contemplan sanciones de hasta 90.000 euros diarios por incumplimiento de plazos.

El pasado día 16, el consejero de Salud, Ramón Quirós, se reafirmó en la tesis oficial al afirmar que la obra civil del HUCA «acaba en diciembre de este año». Asimismo, añadió que «el año que viene será para terminar el equipamiento, hacer la recepción de obra, probar las instalaciones...». Quirós indicó que «yo no sacralizaría una fecha para la apertura, pero las empresas están dando los últimos toques». Y vaticinó que el traslado de una sede a otra obligará a que ambas instalaciones «funcionen simultáneamente durante un tiempo» que actualmente está cifrado en dos semanas.