Oviedo, P. Á.

En 19 pacientes de los 22 pacientes incluidos en el ensayo clínico realizado en el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), la úlcera experimentó un cierre completo tras un período medio de 21 días. Durante estas tres semanas, explica Julián González Sarasúa, los pacientes permanecieron en decúbito prono (tendidos boca abajo), y posteriormente fueron incrementando su actividad de forma progresiva.

Una de las grandes ventajas del novedoso tratamiento mediante células madre consiste en que reduce de forma muy notable la estancia hospitalaria en comparación con la técnica convencional empleada hasta el momento para estos casos, que recurre a colgajos musculocutáneos. La permanencia media en el hospital pasa de 85 días a sólo 43. Asimismo, el tiempo empleado en realizar la cura tópica también disminuye muy sustancialmente: de 20 minutos a 5 minutos diarios.

Los investigadores se han cerciorado de que la curación de la fístula no fue flor de un día. El período de seguimiento de estos pacientes tras la operación llegó, en algunos casos, a 38 meses sin que se hayan observado recurrencias.