El 74 por ciento de los asturianos está a favor de la ley que prohíbe fumar en los locales de ocio cerrados y no ha dejado de acudir a ellos, el 11% acude más que antes y sólo un 14,8% dice frecuentarlos menos, según una encuesta realizada por la Sociedad Asturiana de Medicina de Familia y Comunitaria (SAMFYC). La consulta, hecha pública ayer con motivo de la presentación de los actos del «Día mundial sin tabaco», que se celebrará el próximo 31 de mayo, se realizó a 621 personas (fumadoras, no fumadoras y ex fumadoras), que acudieron el mes de abril a su centro sanitario en las diferentes áreas sanitarias del Principado.

Los datos fueron presentados por José Manuel Iglesias, responsable del grupo de atención al tabaquismo de la Sociedad Asturiana de Medicina Familiar y Comunitaria, en un acto al que asistieron la directora de Salud Pública, Amelia González, José Ramón Hevia, del plan de drogas, José Villazón, presidente del Colegio de Farmacéuticos, y Marta Martínez, presidenta de la Asociación Profesional de Matronas.

Lo más importante para dejar el hábito del tabaco es «querer dejarlo», subrayaron el doctor Iglesias y Amelia González. Un 54% de los encuestados cree que si el tratamiento con medicamentos estuviera financiado ayudaría a más personas a dejarlo. En Asturias, la financiación es compartida, pero no está implantada en todas las áreas sanitarias. El motivo, según explicó la directora de Salud Pública, es que esté o no implantada en la respectiva área la unidad antitabaco. Amelia González insistió en la importancia de no sustituir el tabaco por los fármacos. «Tenemos una sociedad supermedicalizada. Para dejar de fumar se necesita fuerza de voluntad y esfuerzo individual», añadió.

El 72,5% de los encuestados vería mal que se permitiera fumar de nuevo en la hostelería, al igual que el 47% de los fumadores. Uno de los datos más esperanzadores, según el doctor Iglesias, es que desde enero, mes en el que entró en vigor la ley, más de un tercio de los fumadores (34%) ha hecho un intento para dejarlo, lo que supone un incremento de más del 4% respecto al mismo período del año pasado y casi 10 puntos con respecto a 2009.

José Manuel Iglesias aportó datos públicos de contratación en la hostelería que demuestran que «no se está cumpliendo el fatalismo inicial del sector sobre las importantes pérdidas que ocasionaría la reforma de la ley».

Las altas a la Seguridad Social en la hostelería asturiana en los meses de enero, febrero, marzo y abril, fueron 28.307, 28.333, 28.629 y 30.019, respectivamente, cifras muy parecidas, subrayó el doctor Iglesias, a las del año anterior: 28.691, 28.722, 29.723 y 30.095. Nueve de cada diez asturianos creen que la prohibición mejorará la salud de los trabajadores de estos locales y protegerá a los menores del humo ambiental y el 81% opina que mejorará la salud de los ciudadanos.

José Manuel Iglesias destacó, por sorprendente, que el precio del tabaco no influya o influya poco a la hora de dejar el hábito. El motivo de más peso para dejar el tabaco para el 69% de los fumadores es el diagnóstico de una enfermedad, seguido del 25% que lo haría si el humo afectase a algún miembro de su familia.

Por otra parte, José Ramón Hevia dijo que el consumo diario de tabaco disminuye «muy ligeramente». Un poco menos de un tercio de la población continúa fumando, una cifra que calificó de «esperanzadora». La ley, por otra parte, se cumple. Se han abierto 128 expedientes por infracciones, de los que sólo 21 son por fumar en lugares donde no se debía.