Oviedo, Ignacio FAES

Dos galerías de arte asturianas, Vértice y Lola Orato, están presentes en la Feria Internacional de Arte Contemporáneo de Santander, inaugurada ayer en el Palacio de Exposiciones y Congresos de Santander y que finalizará el próximo domingo.

La galería Vértice presenta «Brighton sells what?», un trabajo fotográfico de Luis Veloso. El espacio de arte Lola Orato, por su parte, seleccionó el proyecto «La naturaleza del encuentro», que ha sido desarrollado por Semíramis González y está compuesto por dos obras, «Clorofila 3.0», de María Castellanos y Alberto Valverde, y «Huertos urbanos», de Cristina Fernández.

Vértice apostó por un proyecto inédito del artista Luis Veloso, que utiliza un juego de luz espectacular para crear sus fotografías, al igual que hizo con sus anteriores proyectos, «Iluminosis» y «Without Fuel».

En el primero realizó fotografías de varios edificios de viviendas abandonados. En el segundo, Veloso hizo algo parecido, aunque esta vez el objetivo de su cámara apuntaba a gasolineras abandonadas.

Ahora, manteniendo la esencia de sus anteriores trabajos, «Brighton sells what?» es el resultado de los incesantes paseos del artista por esa pequeña ciudad marinera del sur de Inglaterra. Allí inmortalizó muchos locales comerciales vacíos, haciendo un guiño a la crisis económica que obliga a cerrar un gran número de negocios.

Realizar este trabajo es una tarea minuciosa. Primero, Veloso elige el escenario que desea inmortalizar. Luego comienza un proceso muy complicado para crear la iluminación necesaria. El artista realiza varias fotografías del exterior y del interior del local. El paso final es la composición de todas esas instantáneas en una sola, un resultado espectacular, casi espectral, que parece dotar de vida a las estructuras que eterniza.

Según Nacho Alted, Veloso pertenece a la generación de fotógrafos que busca la belleza en los objetos artísticos prosaicos y mundanos. Su forma de entender y ver el mundo transita en una difusa frontera que mezcla el realismo y el idealismo, dos visiones aparentemente antagónicas, contradictorias, pero que en la cámara del artista resultan hasta reconciliables. Sólo en ese cruce de caminos uno puede llegar a encontrar la luz en lo lúgubre, reflexión en lo anodino, perfección en lo inútil.

Quizás en esto resida el secreto de Luis Veloso. En comunicar sutilmente, en buscar los matices, en insinuar más que en demostrar, obligando a la concurrencia a leer entre líneas, a enfocar bien el objetivo para captar los pequeños detalles, que normalmente son los que contienen las claves del discurso. Veloso te ofrece las pistas poco a poco, como si quisiese aportar la solución del acertijo caminando de puntillas.

El proyecto que presenta la galería Lola Orato, «La naturaleza del encuentro», es la suma de dos trabajos, «Clorofila 3.0» y «Huertos urbanos». El proyecto reflexiona sobre la relación del hombre con la naturaleza y se pregunta si el hombre es cruel con ella o si, por el contrario, la naturaleza ha sido implacable con el hombre.

«Clorofila 3.0» se centra en la naturaleza humana y sus limitaciones sensitivas. Los seres humanos tienen, frente a otras especies, menor capacidad para obtener información de sus sentidos. La obra presenta una cuestión casi moral: ¿existe una sensación emotiva en las plantas?

«Huertos urbanos» es una obra en la que los elementos integrantes son las propias plantas junto a varias proyecciones visuales sobre diferentes espacios. Plantea la importancia de reintegrar lo natural en el entorno urbano, donde el contacto entre hombre y naturaleza queda reducido a la nada. Se muestra un paisaje natural integrado en la urbe.