Los directores de moda de las grandes firmas crean ropa y complementos y el arquitecto William Sofield, nacido en Nueva Jersey hace 50 años, diseña los espacios en los que se venden. De su lápiz han salido más de 800 establecimiento de firmas como Gucci, Bottega Veneta, Yves Saint Laurent, Boucheron o Tom Ford. Uno de sus últimos proyectos ha sido la renovación de la tienda de Santa Eulalia, en Barcelona.

La histórica boutique del paseo de Gracia, creada hace 168 años y la primera en España que organizó en sus salones un desfile de moda, en 1926, luce una nueva imagen gracias a la maestría de Sofield, que ha querido recuperar muchos elementos procedentes de la tienda abierta en 1843. Entre ellos figura una escalera de roble, relojes, mostradores, parte del ascensor de los años 20 y sillas que se utilizaron en aquel mítico primer desfile.

William Sofield nació en 1961 en Nueva Jersey, Estados Unidos, y se licenció en Arquitectura y Urbanismo en la Universidad de Princeton. Sus buenas calificaciones le hicieron disfrutar de una beca para poder ampliar sus conocimientos en la Fundación Helena Rubenstein, en la que se formó para terminar mudándose a Nueva York, donde Sofield empezó a buscar su primer trabajo. Un carpintero italiano, ubicado en el Upper East Side, le enseñó todo sobre la profesión. En 1992, montó su primera empresa, Aero Studios, y le llovieron los clientes con «firma» prestigiosa.

Fuera del ámbito de la moda, una de sus obras más reconocidas es el diseño de interior del hotel Soho Grand, en Manhattan. Sofield fusionó la elegancia modernista que caracteriza al lugar con elementos industriales procedentes de los años 20. El Sofield Studio tiene sede en Los Ángeles y su propietario aborda proyectos como la redecoración de las oficinas de Walt Disney.

La sopera «bloom», creada por el británico Michael Eden para Eden Ceramics, es una auténtica escultura para lucir en la mesa, que combina el nailon industrial con la cerámica. Está inspirada en los modelos tradicionales de Josiah Wedgwood. Puede encontrarse en tonalidades como el verde, azul, gris, naranja, amarillo y morado. La más pequeña cuesta 4.750 euros; la mayor se consigue por 6.250. Ideal para disfrutar de unos calditos de auténtico lujo.

Si por algo se caracterizan los diseños de María Delgado es por dar lugar a delicadas piezas que parecen sacadas del mundo de los cuentos. La creadora, que ha colaborado con grandes de la moda española como Francis Montesinos, es especialista en tocados y complementos, entre los que también se encuentran sofisticados pendientes, dignos de una diva de Hollywood. Una de las ventajas es que las colecciones de Delgado pueden encontrarse en Asturias.

La nueva colección de cámaras La Sardina, cargadas con película de 35 milímetros, están construidas con una lente superangular espectacular. Están preparadas para realizar múltiples exposiciones y vienen equipadas para rebobinar en cualquier momento.

El modelo «Marathon», que aparece en la imagen, con su diseño vintage exclusivo, es la cámara náutica y verde de La Sardina, destinada a auténticos lobos de mar que quieren inmortalizar cada momento. Sus brillantes colores exteriores hacen honor a sus especificaciones: una lente gran angular impresionante, un dispositivo de rebobinado muy fácil de usar y un formato compacto. El precio es de 49 euros.