Oviedo, P. R.

En octubre de 1937 las tropas franquistas se hacen con el control de Asturias. Numerosos socialistas abandonan la región, y muchos se refugian en Barcelona, constituyendo la Agrupación de Socialistas Asturianos en Barcelona, con José Barreiro como secretario general. Los expedientes personales de todos y cada uno de los integrantes de esa agrupación figuraban hasta hace unos meses en el Centro Documental de la Memoria Histórica (CDMH) de Salamanca, sede del Archivo Nacional. Hoy están en Cataluña, junto a toda la documentación del Centro Asturiano de Cataluña, al que pertenecían prácticamente todos ellos y con quienes compartían dirección postal. De hecho, en el inventario oficial figura el nombre de Centro Asturiano de Refugiados de Cataluña.

Policarpo Sánchez, el investigador que ha denunciado públicamente el traslado «ilegal» de estos y otros documentos de otras comunidades autónomas o de organizaciones estatales desde Salamanca a Barcelona, aseguró ayer a LA NUEVA ESPAÑA que tanto los expedientes de la Agrupación Socialista como los del Centro Asturiano estaban en carpetas idénticas.

En cada uno de los expedientes figuran el nombre y los datos personales del afiliado, así como la agrupación asturiana a la que pertenecía. Policarpo Sánchez cita como ejemplo la ficha de la que fuera diputada socialista asturiana, Veneranda Manzano, con la certificación personal expedida por José Barreiro. «El Gobierno no ha respetado la voluntad legítima de los propietarios, el PSOE, en este caso, con una única personalidad jurídica; el traslado incumple los baremos de la ley. Es el PSOE asturiano trasplantado a Barcelona», señala.

En lo que respecta al Centro Asturiano de Barcelona, Policarpo Sánchez afirma que existe un libro de actas de una época anterior al año 1937. Las cajas que se trasladaron a Cataluña estaban divididas en dos tipos de expedientes, unas pertenecían a la Agrupación y otras al Centro Asturiano.

Además de esta documentación, la Generalitat trasladó a su archivo documentos de particulares asturianos sin ninguna relación con Cataluña y 116 cajas del PCE, en las que también hay historia de Asturias.

En el año 2008 la dirección del Archivo Histórico de Asturias ya había alertado a la Consejería de Cultura del Principado de la posibilidad de que entre los fondos devueltos a la Generalitat figurasen documentos asturianos incautados en Barcelona pero pertenecientes al patrimonio documental de Asturias.

Tanto la FSA-PSOE como IU de Asturias manifestaron a través de sendos portavoces que la Generalitat debe devolver al archivo nacional aquellos papeles que no pertenecen a Cataluña.

Policarpo Sánchez asegura que durante la tramitación de la ley de restitución de documentos históricos, la Comisión de Dignidad de Cataluña trató de presionar a IU para que retirara una enmienda en la que se exigía que quedaran excluidas del traslado las organizaciones de carácter estatal.

El Gobierno asturiano hizo pública una nota el pasado domingo en la que aseguraba que la Consejería de Cultura está recabando la información necesaria sobre ese traslado «para llevar a cabo todas las actuaciones pendientes, de acuerdo con la legalidad vigente».

El polémico traslado, que no sólo afecta a Asturias -hay otras comunidades autónomas y organizaciones estatales implicadas-, motivó con toda probabilidad la destitución, el pasado 14 de septiembre, de la directora del archivo de Salamanca, María José Turrión. La ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde, lo justificó diciendo que ya no gozaba de su confianza.