Madrid, Efe

Una manifestación multitudinaria de profesorado, padres y alumnos de toda España recorrió ayer el centro de Madrid para enviar un «aviso» a todas las comunidades autónomas y al Gobierno que salga de las elecciones generales para que dejen la educación pública al margen de los «recortes».

La denominada «Marcha a Madrid» estaba convocada por las direcciones nacionales de los principales sindicatos del sector y la Confederación de Padres y Madres de Alumnos (CEAPA), mayoritaria en la escuela pública. En general, sus dirigentes han querido sensibilizar a toda la sociedad de la importancia de la educación pública para la cohesión social, salir de la crisis y el futuro del país. Han advertido de que las movilizaciones se mantendrán si persisten los recortes.

La manifestación se ha celebrado después de movilizaciones autonómicas contra el aumento de horas lectivas del profesorado de la educación pública, como en Madrid, donde ya ha habido seis jornadas de huelga este curso, Castilla-La Mancha, Galicia, Navarra o Cataluña.

Los manifestantes, más de cien mil según los organizadores (la Delegación del Gobierno no ha facilitado datos), partieron de la glorieta de Carlos V (Atocha) hasta llegar a la plaza de Jacinto Benavente, donde la actriz Pastora Vega leyó un manifiesto conjunto.

«Si hay algún camino para la libertad y la justicia, es el de la educación», decía la declaración de los convocantes, además de acusar a «los gobiernos» en general de hacer «pagar a la enseñanza una crisis que ella no ha causado».

Abogan por aumentar el prestigio de la educación pública y su profesorado y por financiarla «adecuadamente», sin que vea afectada por «los recortes presupuestarios»

Al margen, centenares de manifestantes decidieron «espontáneamente», según aseguraron algunos de ellos, hacer un recorrido no previsto por la organización, dada la aglomeración y la imposibilidad de subir por la calle de Atocha.

Recorrieron improvisadamente, sin incidentes, el paseo del Prado y la calle de Alcalá hasta la Consejería de Educación y Empleo de Madrid, donde gritaron contra la política educativa de la comunidad.

Ya en la Puerta del Sol, organizaron una sentada de niños y adultos a las puertas de la Presidencia autonómica y pidieron la dimisión de la presidenta.