Oviedo, P. R.
El nuevo Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), que se levanta en terrenos de La Cadellada, en Oviedo, se inaugurará «de verdad y no levantando plaquitas» en otoño de 2013, según anunció ayer en la Junta General el consejero de Salud, José María Navia-Osorio. Su coste final, añadió, será de 1.733 millones de euros, que se abonarán en veinticinco años. La recepción de la obra, siempre según el Consejero, se producirá a finales de marzo de 2012 y desde entonces y hasta los meses de verano se realizarán las pruebas del edificio, para las que será necesario instalar algún mobiliario. En abril comenzará la instalación de los aceleradores lineales, «los equipos más difíciles de montar», dijo Navia-Osorio.
En lo que respecta al Hospital Álvarez-Buylla de Mieres, la recepción de la obra se producirá en las próximas semanas, y la inauguración, a finales de 2012.
El consejero de Sanidad ofreció estos datos -algunos de ellos ya los había contado la pasada semana- a petición del diputado del Grupo Popular Carlos Galcerán, quien, en interpelación urgente, le solicitó información concreta sobre cinco cuestiones del nuevo HUCA: plazos de la obra, traslado, equipamiento, coste final de la obra civil y contenido del equipamiento.
Navia-Osorio dividió su respuesta en dos partes. En la primera hizo historia del proyecto, remontándose al estudio de viabilidad técnica y económica y propuesta del campus de Ciencias de la Salud presentado por el Gobierno de Álvarez Areces en 2001. Se hablaba entonces, siendo consejero Francisco Sevilla, de un HUCA finalizado en 2010 con un coste de 160 millones de euros y una planificación de pagos hasta 2010. Su relato concluyó en los 1.733 millones de euros que, según el Consejero, acabará costando el equipamiento.
Esta falta de respuesta irritó al diputado Galcerán, para quien en este proyecto «se ha pasado de la chapuza a la confusión» y, en este momento, «no hay nadie que conozca los datos verdaderos del nuevo Hospital». El diputado popular calificó la contestación del Consejero de «tomadura de pelo» y le recordó que la oposición «necesita que el Gobierno conteste a sus preguntas». Galcerán anunció la presentación ante la Mesa de la Junta de una queja por su actitud.
A esta queja se sumó la diputada de IU Noemí Martín, quien, en tono coloquial, le recordó a Navia-Osorio: «Esto del Parlamento no va así. Venimos aquí para que nos escuche y porque queremos saber».
La diputada de IU advirtió de que en algo más de cuatro meses que Foro Asturias lleva en el Gobierno «cada vez que hablamos del HUCA sube el precio». A su juicio, «sigue sobrando mucho ajuste de cuentas y sigue faltando acción».
El consejero de Salud dejó los datos para su segunda intervención, pero tampoco respondió a todas las cuestiones. Se declaró heredero de un proyecto «con retrasos, con dificultades para financiarse y sin liderazgo» y dijo que lo primero que había hecho fue «recuperar el liderazgo». Anunció que, en colaboración con Gispasa, la empresa que gestiona las obras del HUCA y del Álvarez Buylla, se ha elaborado un plan de ajuste de unos 414,8 millones de euros sobre el modelo económico diseñado en el período 2011-2036 por el Gobierno anterior. Las líneas de ahorro son las siguientes: 118 millones aprovechando los excedentes de tesorería de Gispasa, con reducción de la línea de crédito del Principado y de las cuotas de equipamiento y por servicios; 236 millones en el ajuste de los pliegos de mantenimiento y servicios, manteniendo la calidad; 42 millones en la posible sustitución de las cuentas de reservas exigidas por el Banco Europeo de Inversiones (BEI) por avales del Principado y 18,8 millones en la racionalización de la compra del equipamiento.
Navia-Osorio añadió que estas mejoras permitirán reducir los pagos previstos por el Principado para esta legislatura. Este año se pagarán 16 de los 71 millones previstos inicialmente; y el próximo, 36, en lugar de 96 millones.
«Las obras están terminadas», dijo la diputada socialista Pilar Alonso, quien pidió a Navia-Osorio «un mínimo de humildad» cuando habla del HUCA, «uno de los proyectos emblemáticos de esta región». «No ha demostrado nada, lo que ha traído aquí es un ejercicio teórico que no se sustenta en nada firme», añadió.
