Oviedo

Tal como vaticinaron los técnicos de la Consejería de Sanidad del Principado, el pico máximo de la gripe llegará a Asturias en la segunda quincena de este mes. Asturias lleva unos días en niveles altos, con una incidencia de 127,4 casos, y por encima de los 100 ya se considera que entra en fase epidémica. Los menores de 5 años son los más afectados, seguidos de los que tienen entre 5 y 14 años y los mayores de 64.

En la última semana del 2011 los servicios sanitarios detectaron 1.240 casos, el doble que siete días antes. El factor de riesgo más importante es el asma, que padece el 5,5% de los afectados por este virus.

Malestar general, dolor de garganta, tos y fiebre alta son los síntomas más comunes. Los especialistas aconsejan tomar paracetamol y beber mucho líquido; si la fiebre es muy alta y persiste conviene acudir al médico.

El virus de la gripe, que se retrasó el año pasado debido al buen tiempo otoñal, comenzó a circular de manera apreciable a finales de diciembre. En la última semana del pasado mes de noviembre (la que iba del 20 al 26) se habían registrado en el Principado menos de 500 casos, una incidencia «baja» con una difusión del virus «nula», según informó entonces el Servicio de Vigilancia Epidemiológica de la Consejería.

«Lo habitual es que los virus comiencen a circular a finales de diciembre», indicaron los técnicos de Vigilancia Epidemiológica, quienes reiteraron que los patrones habituales de comportamiento de la gripe están sometidos a excepciones. Lo normal es que la onda de incidencia de la epidemia alcance su nivel máximo «tres o cuatro semanas después de haber comenzado a circular los virus».

El invierno pasado la curva comenzó a ascender en la semana 49 (hacia mediados de diciembre), y llegó a su cúspide en la primera semana de enero. Este invierno, por los datos de que se dispone, la curva comenzó a crecer en la última semana de diciembre, por lo que es previsible que los casos crezcan en los próximos días.