Oviedo, J. B.

Hay tradición de nominaciones y premios «Goya» entre asturianos. Anteayer se anunciaron las nominaciones, y nuevamente algunos profesionales de la región, ilustres ya en estos y otros galardones del cine, como María José Iglesias y Pelayo Gutiérrez, repiten con películas con grandes aspiraciones. Hasta es posible que haya otros vinculados a la región en otras categorías de la Academia de Cine, que entregará los galardones en una ceremonia en Madrid el próximo mes de febrero. Con los clásicos asturianos este año está además un debutante en el cine con orígenes en el Principado, Paco Arango.

La ovetense María José Iglesias, que ya tiene el «Goya» y además diseñó el vestuario de la gala de 2009, está nominada por su trabajo en «La voz dormida», la película de Benito Zambrano.

María José Iglesias dijo ayer a LA NUEVA ESPAÑA que está muy contenta «con esta película, que costó mucho esfuerzo, ya que Benito Zambrano estaba obsesionado con que pareciera muy real». Y se refiere a lugares muy concretos, como la cárcel de Las Ventas, «pero también salen la burguesía franquista y otros ambientes. Es una película complicada. Es dentro de la cárcel, ahí está ambientado todo. Fue un trabajo grande y de mucha gente», explica Iglesias. La diseñadora ya logró el «Goya» en 2006 por «Camarón» y estuvo en la órbita en 1996 por la «Ley de la frontera». «Soy asturiana y sobrina de Alfonso. Yo creo que esa parte creativa la heredé de él», cuenta la diseñadora carbayona.

Otro clásico de los galardones del cine español es Pelayo Gutiérrez, avilesino, que tiene ya en el bolsillo varias nominaciones y premios de la Academia, que preside actualmente González Macho.

Esta vez está nominado a mejor sonido por «La piel que habito». Además, este año se mide con un colega con el que comparte aventuras sonoras. «Estoy contento por la película de Almodóvar y porque compito con Nacho Royo-Villanova, que trabaja en la película de Urbizu "No habrá paz para los malvados" y es colega de trabajo. Fue un día divertido entre nosotros», apunta Gutiérrez. Y añade: «Estoy muy contento de estar nominado, con Pedro Almodóvar había hecho anteriormente "Los abrazos rotos". Almodóvar es la primera división en todo. Es un gustazo», indica este asturiano, que vivió en Avilés hasta los «8 años y luego en Salinas». Pelayo Gutiérrez tiene tres «Goya», por «Al otro lado de la cama», «Te doy mis ojos» y «Obaba», y varias nominaciones. Además, lo acaban de nominar a los premios «Gaudí» por «Chico y Rita», el filme de animación de Fernando Trueba con el jazz y la música de Bebo Valdés de fondo.

Hay una tercera persona en los premios, Paco Arango, asturiano de origen y debutante en la pantalla grande.

Paco Arango siempre ha estado vinculado al arte y ya tuvo una intensa etapa como músico pop. En su primer filme para la gran pantalla, el hijo del asturmexicano Plácido Arango aspira al premio al mejor director novel por su película «Maktub», filme que también opta al «Goya» a la mejor actriz de reparto por el papel interpretado por Goya Toledo. «Maktub» es una historia navideña inspirada en la vida de Antonio González, un crío que murió a causa de un cáncer de médula y que, a pesar del drama, genera sonrisas. «Todo lo que yo he visto alrededor de estos chicos enfermos es que la felicidad es la que reina, y reinan las carcajadas; por eso no quería hacer una película sobre la enfermedad, sino un cuento de Navidad», explicó el director en el estreno del filme, el pasado mes de diciembre, en declaraciones recogidas por LA NUEVA ESPAÑA. Y añadió: «Quería hacer una película sobre esto desde que conocí al auténtico Antonio, que participó en el guión y fue poniendo sus condiciones, como que estuviera su compañero de cuarto o que le pusiera una novia».