El Comité Nacional para la Prevención del Tabaco (CNPT), que agrupa a miles de profesionales sanitarios, ha pedido este domingo al Gobierno que apoye el envasado genérico de los cigarros, de modo que las cajetillas dejen de ser un reclamo para el consumo.

La iniciativa ha partido por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y se está discutiendo ahora en la Unión Europea, por si se incluye en la revisión de la directiva sobre los productos del tabaco.

A través de ella se pretende que los paquetes sean simples cajetillas "indistinguibles" unas de otras, salvo que "uno se tome la molestia de leer en caracteres uniformes la marca y el nombre del fabricante".

"Adiós colorido, logotipos específicos y muy vistosos y, por supuesto, nada de publicidad y promociones dentro y fuera del paquete de cigarrillos", ha explicado la plataforma en una nota de prensa.

El CNPT quiere que el Gobierno español apoye esta medida y recuerda que el envasado genérico se contempla ya en el Convenio Marco de Control del Tabaquismo, auspiciado por la OMS, que firmó España junto a otros 170 Gobiernos.

Hay ya, por otra parte, países que han apostado por ello, como es el caso de Australia, donde comenzará a ser realidad este mismo año.

Mientras tanto, y tras la prohibición de la publicidad en la mayoría de los países de la UE, la industria tabacalera ha concentrado su estrategia de promoción en los envases de sus productos, dirigiendo su atención en especial a jóvenes y mujeres.

"Se están diseñando paquetes más atractivos, coloridos y con mayor glamour, con el objetivo de que los mecanismos inconscientes que orientan la psicología humana pierdan de vista el carácter nocivo del tabaco y fijen su atención en el sugerente envoltorio que presentan", señalan desde el Comité.

Los profesionales sanitarios sacan a colación unas palabras del comisario europeo de salud, John Dalli, quien dijo recientemente que trece millones de europeos sufren enfermedades relacionadas con el tabaco y que la gran mayoría de las personas empiezan a fumar antes de los 18 años, a menudo porque piensan que "es chulo".

El comisario se preguntó si cuando los jóvenes ven un paquete de cigarrillos "realmente entienden de qué va el producto y cuáles son los riesgos para su salud".

El envasado genérico, según destacan en el CNPT, pretende salir al paso de esa situación "desnormalizando y haciendo menos atractivo" su consumo.

La organización entiende que estos envases reducirán "las falsas creencias" de que hay cigarrillos menos peligrosos para la salud y asegura que la estrategia funciona ya que hay estudios que así lo avalan.

Además, cuenta con el apoyo de la población según las encuestas europeas realizadas al efecto al tiempo que "no incrementa el contrabando y es legal", puesto que el uso de la marca es "un privilegio y no un derecho de los fabricantes, supeditado en todo caso al interés general".

"En España el envasado genérico del tabaco puede ser muy beneficioso al tener uno de los porcentajes de jóvenes fumadores más altos de Europa, sobre todo de mujeres jóvenes, y estando demostrado que esta medida es especialmente eficaz para que menos de entre ellos se enganchen al tabaco", concluye el CNPT.