Gijón, C. J.

El instituto Universidad Laboral perderá el próximo año una de las cinco unidades de primero de ESO, una decisión que la Dirección General de Recursos Humanos, Centros y Autonomía de Gestión de la Consejería de Educación atribuye a la situación «límite» del centro «por falta de espacios» y que repercutirá en las familias de los colegios Nicanor Piñole y Noega. Ambos centros tienen asignado el Instituto de la Laboral y los de Montevil y Roces para el correspondiente salto de ciclo educativo de sus hijos, de sexto de Primaria a primero de Secundaria. Pero este año se han encontrado que la merma de plazas en el primero les impedirá conservar su derecho a la libre elección en el modelo vigente de adscripción. A ello se suma que cuatro días antes de que finalizara el plazo de entrega de la documentación para la reserva de plaza en los centros de Secundaria, la Consejería había firmado un decreto por el que se reducía la oferta del Instituto Universidad Laboral «y no se nos comunicó nada al respecto», denuncian los padres.

La realidad, dicen, es que ahora se encuentran con que tampoco existen plazas en el centro que era su segunda opción (Montevil) y se les asignaría automáticamente el de Roces (que crece para el próximo curso en una unidad, pasando de dos a tres), que rechazan por varias razones. La primera de ellas, la falta de transporte escolar para que los alumnos puedan llegar al centro, pues se verían obligados a utilizar las líneas de transporte urbano. La segunda razón que aducen los progenitores para rechazar esta opción es que los niños en la Laboral tienen la opción de cursar como asignaturas optativas Alemán e Italiano mientas que en Roces la única oferta en este ámbito es de Asturiano.

«Es una vergüenza que a estas alturas estemos como estamos», subrayan los padres, que observan con cierta impaciencia cómo se consumen los plazos de reclamación sin que desde la Consejería hayan atendido a sus reclamaciones. «Nunca hubo problema para entrar en el Instituto de la Laboral, normalmente los niños entraban directamente. Lo único es que pedimos es que se nos respete la elección de centro», añaden, al tiempo que exigen a la Consejería que acepten sus planteamientos.