El consejero de Sanidad de Asturias en funciones, José María Navia-Osorio, ha considerado hoy que el debate del futuro de la sanidad no puede empobrecerse intelectualmente conduciéndolo únicamente hacia la aplicación de copagos como si fuera una medida inevitable para superar la situación de crisis.

El consejero defiende hoy esta postura en el seno del Consejo Interterritorial de Salud celebrado en Madrid en el que el Ministerio plantea a las comunidades autónomas que los pensionistas paguen el 10 % de los medicamentos que se les receten y que los trabajadores paguen la mitad, en el marco de las medidas de ajuste sanitario para ahorrar 7.000 millones de euros.

Navia-Osorio ha confirmado su colaboración y disponibilidad a adherirse a las decisiones mayoritarias que se adopten en el Consejo Interterritorial -en el que son mayoría los consejeros del PP- lealmente y con la única reserva de que no entren en contradicción con el programa electoral que Foro propuso en Asturias.

El consejero asturiano ha destacado la necesidad de adoptar medidas positivas de mejora de la gestión y búsqueda de una mayor eficiencia, por lo que apoya algunas de las propuestas del Ministerio como la compra centralizada de medicamentos y la adecuación de los envases a la duración de los tratamientos.

También la realización de estudios coste-beneficio de los medicamentos en la prestación farmacéutica y el control del turismo sanitario.

Navia-Osorio ha recordado como ejemplo positivo de coordinación el reciente acuerdo-marco para la compra de vacunas antigripales al que se adhirieron voluntariamente catorce comunidades autónomas, incluida Asturias, con el consiguiente ahorro económico.

Además, ha instado al Ministerio a que asuma su papel de coordinación estimulando y divulgando iniciativas innovadoras puestas en marcha en las comunidades autónomas, como la compra de medicamentos mediante subasta en Andalucía, la gestión de pacientes crónicos en el País Vasco o las unidades de gestión clínica de Asturias. EFE