Un videoclub pequeño tenía que pagar 62 euros y otros 62 más por máquina. Ciento veinticuatro euros todos los meses. Eso los locales pequeños, los grandes habría que echar la cuenta según metros. Un sistema tarifario de la Sociedad Genera de Autores y Editores (SGAE) que acaba de llevar un varapalo tras la sentencia de la Audiencia Provincial de Oviedo, pionera en España, que da la razón a la Asociación Asturiana de Videoclubes. La denuncia, explica el presidente de la asociación, Gerardo Roberto Solar, a LA NUEVA ESPAÑA, «comenzó con Emilio, el anterior presidente, en 2011, donde los tribunales ya le dieron la razón. Posteriormente prosiguió y ya nos unimos más para conseguir mayor fuerza. También se nos dio la razón en lo mercantil y ahora en la Audiencia», explica el actual presidente de Asasvi, que habla desde su local en Sama. A esta asociación están abonados el 93% de los videoclubes que funcionan en Asturias.

Según explica Solar, las tarifas de la SGAE iban en función de los «metros de local en lugar de por copias porque no les interesaba hacer una inversión para contabilizar el número de obras que tenían salida». Para los videoclubes, añade, el sistema de tarifa por metros «no es más que un recargo sobre el IBI con un impuesto cultural».

Distintas informaciones ya hablan de que la resolución le supondrá a Autores la devolución de varios millones de euros, salvo que se llegue a otro tipo de acuerdos entre las partes. La SGAE se muestra conciliadora y, según explican, propone a «los videoclubes diálogo y consenso». Pero tiene su interpretación de la sentencia. A su entender «ratifica el pago del derecho de autor por el alquiler de películas en videoclubes y solamente anula el criterio de cálculo de su tarifa». Ocurre que justo este punto era uno de los reclamados por los videoclubes. La SGAE pone otro matiz tanto en la parte económica como en la judicial: «La sentencia, en cualquier caso, tiene carácter declarativo y no implica condena ni efectos retroactivos. Esto es: no deriva consecuencia económica directa para SGAE. Esta entidad respeta la sentencia de la Audiencia, aunque valorará el recurso al Tribunal Supremo».

No es la primera vez que desde Asturias se mantienen pulsos con Autores en diversos frentes como la ofensiva de la hostelería asturiana para rebajar las «abusivas» tarifas. Esto ocurría ante una demanda de tres restaurantes que entendían que no tenían por qué pagar derechos de las canciones que se ponen en bodas, bautizos y otros banquetes. Los sistemas de tarifa de la SGAE ya fueron puestos en entredicho en diversas ocasiones, una de las últimas veces que perdieron la batalla fue con el canon digital (aunque este fue a nivel nacional). La entidad de gestión está revisando ahora todos estos mecanismos e intentando cambiar la imagen con la llegada de su nuevo presidente, Antón Reixa.