La Consejería de Educación tiene deberes más que de sobra de aquí a las próximas elecciones autonómicas, en primavera. La titular del departamento, Ana González, enumeró ayer en la Junta General la actividad administrativa hasta mayo, un total de 16 proyectos de decreto, entre ellos el que va a regular la organización de las escuelas para los niños menores de 3 años a través de un consorcio regional, y el decreto de regulación de la orientación educativa, un borrador que cuenta en principio con el visto bueno de las organizaciones sindicales.

Más polémica va a haber con el proyecto de decreto que regula los Centros Integrados de Formación Profesional (CIFP) del Principado. El primer borrador fue muy criticado por los representantes de los trabajadores por entender que se concedían prerrogativas excesivas a los directores de los centros. La Administración sostiene que tales prerrogativas vienen sobrevenidas de la regulación estatal.

Quedan sin concretar, entre otros proyectos, cinco currículos de ciclos formativos, un decreto que regula los contenidos educativos de primer ciclo de Educación Infantil, y el reglamento general de desarrollo de la ley de Patrimonio Cultural.