Pleno asturiano en el XI Festival de Cine Europeo de Sevilla. Los documentales "ReMine, el último movimiento obrero", de Marcos Martínez Merino, y "Equí y n'otru tiempu", de Ramón Lluis Bande, fueron galardonados, respectivamente, con los premios a la mejor película de las secciones "Las Nuevas Olas-no ficción" y "Resistencias". Entre tanto, el filme "Turist", dirigida por el sueco Ruben Östlund, se alzó con el Giraldillo de Oro a la Mejor Película, mientras "The Kindergarten Teacher", del israelí Nadav Lapid, consiguió el Giraldillo de Plata.

Según el jurado, "ReMine" -que hoy mismo será estrenada en el auditorio del Centro Niemeyer de Avilés, a las seis de la tarde- fue apoyada "de forma unánime" por tratarse de una producción "necesaria, honesta y emotiva", "un testimonio de la dignidad de los mineros y un legado para futuras generaciones". Sobre "Equí y n'otru tiempu", el acta subraya que "refleja una historia poco conocida dentro y fuera de España con rigor, meticulosidad, originalidad y eficacia". "El resultado es un film lacónico y emocionante que logra transformar la pantalla en un monumento, consiguiendo mantener viva la memoria".

Con el galardón a "ReMine", Marcos Martínez Merino no cabía en sí de gozo. Conversó con LA NUEVA ESPAÑA dos minutos después de saber que el trabajo por él dirigido había sido premiado. "Les dije anoche [la del viernes] que me iba a Asturias, que tenía el estreno en Avilés. Me dijeron que qué va. Y ahora me acaban de decir que acabamos de ser reconocidos por un jurado internacional y en un festival tan prestigioso como este de Sevilla", relató por teléfono. "Esto es increíble, la guinda a tres años de trabajo, el fruto final de una decisión de cambio de vida: dejar la televisión y hacer cine", añadió.

La película de Marcos M. Merino y de Marta Fernández Crestelo -su productora- se centra en las movilizaciones de los obreros mineros en el verano de 2012: los cortes de carretera, el encierro en el Pozu Santiago, la Marcha del Carbón, la entrada en Madrid de los mineros iluminados por las velas: "Madrid, entero, está con los mineros".

"No he podido todavía digerirlo", apostilló. En la noche de ayer recogió el premio. A las seis de la mañana hoy debía tomar el tren hacia Oviedo. A las cuatro y media de la tarde tiene que estar en el Niemeyer. No hay entradas para el primer pase con público en el Principado. "Desde que nos dijeron que habíamos colgado el cartel de no hay localidades estamos más que nerviosos", aseguró. "La película es de los mineros y será cuando la vean por primera vez, imagínate".

Marcos M. Merino se felicitó también por el triunfo de Ramón Lluis Bande. "Dos de los premios oficiales de Sevilla se van para Asturias, una región sin industria, dos asuntos de primer orden: el fin de la minería y la memoria histórica".

Una agenda repleta

La agenda de Merino es intensa: el jueves se hace el preestreno de su largo en la sala más importante de los multicines del centro comercial Caudalia. A partir del viernes se puede ver en la misma sala mierense y en la mayor del centro comercial Alcampo, en El Entrego. "Y el sábado vamos a Bilbao. Después vendrá Barcelona. Es una maravilla", concluyó.

El director del certamen sevillano, José Luis Cienfuegos -asturiano y durante años director del Festival de Cine de Gijón-, enfatizó que esta undécima edición del festival ha acogido "muchos cambios" y ha superado "riesgos inimaginables". El jurado de la sección oficial del festival estuvo presidido por el cineasta español Carlos Vermut.