La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

La Biblioteca de Asturias, en precario al perder el 90% de su presupuesto para la reposición y adquisición de nuevos fondos

Desde su inauguración en 1987 ha multiplicado por diez los fondos que custodia

La Biblioteca de Asturias "Ramón Pérez de Ayala" vivió tiempos mejores. Desde su inauguración en 1987 ha multiplicado por diez los fondos que custodia, pero ese enriquecimiento contrasta, en los últimos cuatro años, con una merma alarmante en los presupuestos para adquisiciones, reducidos en la actualidad a una décima parte del montante económico que llegaron a tener años atrás, o dicho de otra forma, el recorte asestado a la Biblioteca es del tenor del 90 por ciento.

En lo referente a la precariedad con la que ha ido manteniéndose en el último lustro, las cifras hablan por sí solas. Si en el año 2009 eran 46 personas las que desarrollaban allí su trabajo, en 2015 ese número mengua a 37, al dejar sin cubrir vacantes de jubilación y fallecimiento. En cifras económicas, el gasto de personal estaba en 2009 en torno a 1,2 millones anuales, disminuyendo en el presente a 750.000 euros.

Si el ajuste de personal se hace sentir en la conservación y restauración de los fondos y en la atención al público, el recorte presupuestario limita de manera alarmante las funciones que debe desarrollar una biblioteca, lo que queda de manifiesto con la desaparición de su catálogo, por falta de fondos para adquirirlos, de la mayor parte de las novedades editoriales que salen al mercado.

"El presupuesto para compras está tan menguado que es imposible acercarse a la cantidad de obras que se publican cada año". Las quejas de Milagros García Rodríguez, directora de la Biblioteca de Asturias, se comprenden fácilmente. Sólo es necesario comparar las cantidades para adquisiciones que había en el año 2008 -369.958 euros- con los 33.000 con que han contado este año. La rebaja reduce la partida en un 90% y con la menguada cifra resultante ha habido que reducir no sólo la compra de libros, también los ejemplares de revistas, periódicos, discos y películas.

La crisis está siendo especialmente aguda para la Biblioteca. Además del descenso en la adquisición de novedades, se prescindió de periódicos extranjeros y de los ejemplares de comunidades limítrofes. Lo único que creció en estos últimos años fue el préstamo interbibliotecario a causa de que el déficit de títulos obliga a pedirlos a otros centros municipales que, aunque parezca sorprendente, en muchos casos cuentan con mayor presupuesto para compras.

Milagros García subraya además que la de Asturias no es una biblioteca al uso, sino que acoge dos bibliotecas: es cabecera de la autonomía y comparte espacio con la Biblioteca de Oviedo. Como personal especializado cuentan con 5 bibliotecarios, tres de los cuales se dedican al fondo de conservación y dos a atender las necesidades de lectura de la población. Una plantilla que la directora ve escasa. "Se necesitarían otros dos bibliotecarios y sustituir a los ordenanzas por auxiliares de bibliotecas".

Entre las necesidades acuciantes incluye el mantenimiento de los fondos. La falta de recursos está impidiendo que colecciones de periódicos y revistas que antes se encuadernaban se guarden ahora en paquetes hasta la llegada de días mejores. Tampoco se atiende la restauración de los ejemplares actuales y antiguos que se deterioran con el uso ni se puede afrontar toda la digitalización que sería conveniente realizar. En 2008 contaban con 40.000 euros para mantenimiento, ahora esa labor debe realizarse con 4.000. El resultado es la obligada retirada de los fondos en mal estado con la consiguiente pérdida de material disponible para el usuario. Lo mismo ocurre con donaciones y depósitos que esperan guardados en cajas que las finanzas permitan su recuperación.

Al catálogo de deficiencias hay que incorporar el equipamiento informático, en muchos casos obsoleto y con restricciones de accesos que impiden acceder a informaciones de interés. No es menor el problema de espacio, ya que los depósitos de conservación están prácticamente agotados. La Biblioteca de Asturias tiene digitalizados 1.782 libros, además de periódicos, manuscritos..., un proyecto que sería fundamental seguir desarrollando.

Compartir el artículo

stats