El enfriamiento global ocurrido hace cerca de 40 millones de años indujo la evolución de los perros en América del Norte, según un estudio cuyo autor principal es el profesor de la Universidad de Málaga Borja Figueirido. "Se refuerza la idea de que los depredadores pueden ser tan directamente sensibles al clima y al hábitat como los herbívoros", explica la bióloga Christine Janis, algo "lógico", pero "que no se había demostrado antes".
A partir del estudio de fósiles de 32 especies de perros a lo largo de 38 millones de años, el estudio describe cómo evolucionaron de animales de emboscadas a depredadores que se abalanzan sobre su presa. Gracias a ello, los científicos esperan adelantarse a los cambios que provocará en los perros el cambio climático actual, causado por el hombre.
