El párroco de la iglesia gijonesa de San Pedro, Javier Gómez Cuesta, no difiere en el fondo de las opiniones expresadas recientemente por el sacerdote Pablo D'Ors sobre los sacramentos. Gómez Cuesta, que se declara admirador del sacerdote y de su literatura, esperaba no obstante una explicación más amplia sobre esa introducción de cambios en las viejas formas de las ceremonias religiosas.

Al párroco de Gijón no le parece ninguna herejía intentar renovar para mejorar, entre otras cosas porque asegura que a lo largo de la historia "los sacramentos no se han celebrado siempre de la misma manera". Tampoco ve desacertado que se realice una actualización del lenguaje ritual "porque la gente ya no se expresa así, las formas de hablar han cambiado".

A su juicio, "hay reformas que hay que acometer ya, que es lo que está haciendo el Papa Francisco, y menos mal", exclama. De las críticas a D'Ors, le produce hilaridad que se le haya tildado de "hereje" y "protestante" porque hereje "es el que no admite la divinidad de Jesucristo" y éste no es el caso. Y concluye afirmando que las reformas que ahora son criticadas no son nada nuevo porque ya estaban en el Concilio Vaticano II.