El Ministerio de Sanidad ha mostrado hoy su satisfacción por que la Orden de San Juan de Dios haya sido reconocida con el Premio Princesa de Asturias de la Concordia, y ha resaltado que sus miembros demostraron una "enorme generosidad" con su labor cuando la crisis del ébola.

Lo ha destacado el secretario general de Sanidad, Rubén Moreno, tras presidir la Comisión de Prestaciones, Aseguramiento y Financiación del Sistema Nacional de Salud (SNS), en la que se ha analizado un borrador sobre la asistencia sanitaria a los "sin papeles".

"Creo sinceramente que la gente que deja sus viviendas, familias y a veces incluso su trabajo y se desplaza a otros país que lo necesita, como ha ocurrido con la crisis del ébola, merecen nuestro reconocimiento tanto a nivel individual como colectivo", ha afirmado.

Moreno ha recalcado que este galardón refleja "el reconocimiento a la extraordinaria labor que han hecho" algunas de esas personas, "jugándose la vida" y de los que hay "mucho que aprender".

Ha recordado que fue precisamente la "generosidad" de esos voluntarios y cooperantes lo que llevó al Ministerio a aprender de esa epidemia que a veces los problemas no se resuelven dentro del propio país, "si no que se resuelven trabajando fuera".

A la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios pertenecían los dos religiosos españoles muertos a causa del ébola, los hermanos Miguel Pajares y Manuel García Viejo.