El químico valenciano Avelino Corma lamenta que en España no haya habido nunca una política "continuada" de apoyo a la ciencia y la tecnología, sólo "impulsos", y aboga por un pacto de Estado que permita una planificación a largo plazo que dé estabilidad y no dependa "de quién esté en el Gobierno".

El "Príncipe de Asturias" de Investigación Científica y Técnica y "Jaime I" de Investigación Básica afirma, en una entrevista con "Efe", que un país fuerte en ciencia y tecnología es aquel en el que hay una "inversión y voluntad pública importante" pero también un caldo de cultivo empresarial y tecnológico con "muy buen nivel".

"En España ha habido impulsos, épocas en las que ha habido una mayor concienciación y se han dedicado más recursos y otras en la que se ha destinado menos", afirma Corma, que reconoce que la crisis económica ha hecho "mucho daño" a la investigación, especialmente a la incorporación de jóvenes al sistema. Esas generaciones han tenido que buscar otros trabajos o irse fuera de España y recuperarlos ahora "va a ser difícil".

Confiesa que aunque le gustaba más la física, se hizo químico porque vio más salidas profesionales y afirma que la química está presente "en todos los actos de la vida, incluso en las relaciones humanas. La vida es pura química, es lo que hace mover el mundo y que estemos vivos".

En el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), primero en Madrid y después en la Politécnica de Valencia, donde junto al profesor Jaime Primo creó en 1990 el Instituto de Tecnología Química (ITQ) y ha realizado 150 patentes, doce de ellas en explotación comercial.

Es experto en catalizadores sólidos ácidos y multifuncionales aplicados al refino del petróleo, petroquímica y procesos químicos, así como en la síntesis y aplicación de zeolitas, compuestos minerales porosos de estructura cristalina cuyas propiedades catalíticas permiten la transformación selectiva de compuestos hacia los productos deseados, al actuar también como verdaderos tamices moleculares.

"En estos momentos, las fuentes alternativas de energía no podrían suministrar de una manera continua y eficiente toda la energía que utilizamos. De momento, vamos a disponer de un cajón que incluya gas, petróleo, carbón, saltos de agua, nucleares, energía solar y viento", afirma.