Lydia Martínez Hevia (Colombres, 1970), es una de las personas que más han luchado para que Colombres haya sido elegido Pueblo ejemplar de Asturias 2015. En la actualidad es vocal de la Asociación de Festejos de la Asunción de Colombres. Nacida en la calle Lamadrid de Colombres, ha vivido en primera fila el proceso iniciado en 2011 para que la capital del concejo de Ribadedeva, tras cinco intentos, haya sido elegida como Pueblo ejemplar.

-¿Qué sintió como colombrina cuando se enteró de que su pueblo era ejemplar?

-Mucho orgullo y satisfacción. Es un reconocimiento que, creo, ya era hora de que llegase. Colombres se merecía este premio. Lo que se va a ver es lo que somos. Gente dinámica, positiva y con muchas ganas de trabajar y de disfrutar muchísimo.

-¿Cómo llegó Colombres a ser Pueblo ejemplar?

-La gente de mi generación, cuando éramos pequeños, nos quejábamos de que Colombres era un aburrimiento y nunca había nada. Los que tuvimos la suerte de quedarnos aquí empezamos a hacer cosas siguiendo los pasos de la gente mayor que ya estaba trabajando con lo poco que había. Nosotros lo que hicimos fue ampliar eso y organizar más cosas. Yo soy tan sólo una más de las muchas personas que estamos metidas en diez o doce asociaciones del concejo, trabajando en muchas cosas a la vez.

-¿Cuál fue, bajo su punto de vista, la clave para que el jurado se decantase por Colombres?

-Creo que al jurado le impresionó que muy poca gente en tan poco espacio estuviésemos agrupados en cuarenta y dos asociaciones que están funcionado de manera activa en estos momentos. El calendario de actividades de Colombres es muy amplio y cada quince días, prácticamente, hay algo.

-¿Cómo se organizan para tener eventos durante todo el año?

-No es difícil, pues hay mucha gente que participa y que viene de los alrededores, desde Llanes hasta el occidente de Cantabria. Son muy fieles a todo lo que hacemos.

-¿Cuál es la celebración más importante?

-La fiesta de fiestas, a día de hoy, es la Feria de Indianos. Es donde están presentes todas las asociaciones de todos los pueblos. La feria indiana representa, además, el alma real del trabajo de la gente y de las ganas de disfrutar de todo el concejo de Ribadedeva.

-¿Qué es lo más ilusionante de este galardón?

-Que nos nombren "Pueblo ejemplar de Asturias" es algo fundamental. Levamos tiempo reivindicando ese apellido. Para muchos, Asturias acaba en Llanes y eso es algo que duele. El apellido de "Pueblo ejemplar de Asturias" ya nos lo han puesto y nos encanta. Supone también una enorme proyección, no sólo en Asturias y en España, sino también en Iberoamérica gracias al Archivo de Indianos. Todo el mundo podrá saber qué es Colombres y cómo somos los ribadevenses.

-¿Soñó muchas veces con el día en que a Colombres llegasen los Reyes de España?

-Siempre nos presentamos con el convencimiento de que se podía conseguir. Ese sueño estaba ahí. Lo que nunca imaginamos fue la repercusión que podía llegar a tener este premio, que va más allá de lo que suponíamos.

-¿Qué le gustaría decirle a los Reyes?

-Me gustaría decirles que están invitados a conocer un día, con tranquilidad, el Colombres de verdad. El día de la entrega será una locura. Les diría que lo que más vale del pueblo es la gente de Colombres. Todas esas personas se merecen este premio.

-¿El nombramiento de "Pueblo ejemplar" supondrá un antes y un después para Colombres?

-Sin duda. Será un trampolín para seguir trabajando, aún con más ganas todavía, de cara al futuro.