La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Aire fresco en los primeros "Princesa"

Los Reyes apuestan por estilismos juveniles, sencillos y en tonos oscuros para los actos oficiales de los Premios

Aire fresco en los primeros "Princesa"

Silueta lápiz. En las recepciones del Reconquista repitió el vestido color vino de silueta lápiz de Carolina Herrera que lució hace meses en Cáceres.

Volumen en degradé. Fiel a Felipe Varela, escogió un vestido asimétrico con corte a la cintura y volantes grises en degradé hasta llegar al blanco.

Oviedo, Noelia HERMIDA

Era la primera edición de los premios "Princesa de Asturias", y la más polémica. Pero los Reyes, ajenos a manifestaciones y contramanifestaciones, mostraron su cara más amable en el Principado para demostrar su confianza en el futuro y el asentamiento de estos premios. Y además de con sus gestos y palabras, lanzaron este mensaje con su vestimenta, apostando por estilismos juveniles, en tonos oscuros y sin ornamentaciones; salvo el collar de perlas que lució ayer la Reina, la primera "joya de pasar" que se pone desde que ostenta el cargo y una de las de mayor valor del joyero de la Casa Real española.

Pero desde su llegada, el jueves por la tarde, los Reyes se empeñaron en demostrar que estamos en una nueva época. Y empezaron su programa por separado. Felipe acudió al concierto organizado por la Fundación Princesa de Asturias, en el auditorio Príncipe Felipe de Oviedo, con un traje de raya diplomática sutil en negro y unos modernos zapatos de hebilla. A la misma hora, Letizia participaba en un homenaje a Francis Ford Coppola en el teatro Jovellanos de Gijón. Una cita a la que acudió con un mono ligeramente acampanado, también negro, de Felipe Varela, unos "peeptoes" del mismo tono, joyas de Swarovski, una cartera rígida y un sencillo recogido bajo.

Ayer por la mañana, la Reina optó por repetir. En las recepciones del hotel de la Reconquista lució el mismo vestido de silueta lápiz y manga hasta el codo en color vino, firmado por Carolina Herrera, que ya se había puesto para la inauguración del curso de Formación Profesional en Cáceres hace unos meses. Pero esta vez cambió los salones nude por unos de Lodi en el mismo color que el vestido. Por su parte, el Rey apostó de nuevo por la raya diplomática y el negro para su traje, que acompañó con una corbata rosa con topos. Su madre, la Reina Sofía, fue otra de las protagonistas de la mañana en Oviedo, adonde llegó con un vestido ablusado hasta la rodilla, con la manga ligeramente abullonada y grandes botones dorados. Un material que también escogió para el resto de complementos.

Por la tarde, la Familia Real volvió a apostar todo al oscuro. Letizia repitió el negro y diseñador, Felipe Varela. Pero cambió su silueta fetiche, la silueta lápiz, por un vestido sin mangas, escote a la caja, corte asimétrico, más corto por delante que por detrás, y con volantes en degradé que van del negro al blanco recorriendo diferentes tonos de grises; concentrando así todo el volumen a partir de la cintura. Pero lo que más destacó de su atuendo fue su collar de perlas. Una pieza compuesta por 37 perlas gruesas, casi idénticas, que tanto lució su antecesora en el trono, la Reina Sofía, y que fue un regalo del Alfonso XII a su mujer María Mercedes cinco meses después de su enlace. Una joya que, según la tradición, sólo pueden lucir las Reinas. Letizia completó el look con unos pendientes de perlas que no sobrepasaban el lóbulo, a juego con la impactante pieza de su cuello; una cartera de raso negro, también de Varela, y sus ya habituales zapatos de salón negros de charol, firmados por Magrit. Para el pelo, volvió a optar por un recogido bajo con la raya al lado, pero esta vez en versión liso y pulido. La Reina subió el tono de su maquillaje, con un ligero ahumado en los ojos y pintando sus labios de rojo.

El Rey lució un traje negro liso, que acompañó con una camisa blanca de cuello abierto y una corbata azul con un difuminado estampado geométrico. Y cambió los zapatos de hebillas por los clásicos de cordones. La Reina Sofía escogió un traje dos piezas en azul noche, con un escote de plisado amplio y falda recta hasta la rodilla. Como Letizia, acompañó su look con un collar de perlas de varias vueltas, zapatos en plata vieja y cartera al mismo tono con cadena.

Compartir el artículo

stats