Las audiencias tienen ese "punto" de nerviosismo previo para los que son recibidos por los Reyes. Una larga fila en las escaleras esperaba para acceder al salón de consejos del hotel Reconquista. Allí era la cita con don Felipe y doña Letizia. Los primeros en ser recibidos fueron los galardonados con las medallas de Asturias 2015. Y ahí destacaron los niños y profesores de las escuelas rurales. Uno de ellos, Carlo González, de San Tirso de Abres, "Pueblo ejemplar" 2011, protagonizó la anécdota divertida del acto. Le recordó al Rey que tenía una foto con él de cuando era pequeñín y lo había "cogido en los brazos", y se la enseñó". De esa cercanía de los monarcas dio fe Carmen Marqués Álvarez, directora de CRA Río Cibea en Cangas del Narcea: "Se interesaban" por el trabajo e "intentaron que los niños interactuaran con ellos. Y sí, los niños hablaron con ellos, también el Consejero", Genaro Alonso. Fue, añadió la profesora, "una experiencia muy buena". El Rey dijo que era "importante lo que hacíamos, que fijaba población y que había que mantenerlo". Para la directora del colegio fue una gran experiencia y, sobre todo, reconfortante, que reconozcan la labor con la medalla de Asturias y con este encuentro con los Reyes.

Otro de los galardonados con la medalla de Asturias, Lisardo Lombardía, relató que la recepción fue muy afable; además se dio la anécdota de que hubo que cerrar la ventana: "'¡Felipe, tienes que hablar más alto', le dijo Letizia ante el sonido de los gaiteros'. Me preguntaron por mi actividad", prosiguió Lombardía, "y les dije que dirigía el Festival de Lorient. Luego les comenté que dirigí el Club Prensa Asturiana de LA NUEVA ESPAÑA durante 18 años, a lo que doña Letizia me comento: '¡Ah, no lo sabía!'. Fue una entrevista cordial, nada rígida y, encima, con la música de gaitas de fondo yo estaba en mi salsa". Con los niños, los profesores y Lisardo Lombardía el resto de galardonados con la medalla de Asturias también posaron y charlaron con los Reyes. Todos coincidieron en la normalidad del encuentro y el interés mostrado por los temas de cada cual. Los siguientes, justo antes de la audiencia a los premios "Princesa de Asturias" 2015, fueron los distinguidos con el premio fin de carrera. Cristina Bayarre, licenciada en Pedagogía, explicó que les quiso expresar que era importante entender la educación no desde la excelencia, sino desde la equidad". Los de los premios fin de carrera tuvieron una charla más académica. Hablaron del malestar de los jóvenes ante las trabas y del problema en Asturias con las comunicaciones, contó Julián Domínguez Fernández, licenciado en Derecho. "Fue agradable, nos animaron y nos dijeron que, hagamos lo que hagamos, siempre adelante".