El nuevo edificio del Museo de Bellas Artes de Asturias, en Oviedo, diseñado por el arquitecto navarro Patxi Mangado, construido por Sedes e inaugurado el pasado 31 de marzo, superpone historia y novedad. Un catálogo editado por el Museo recoge fotografías y planos del edificio desde el punto de vista arquitectónico. Las imágenes se acompañan de dos textos, uno del arquitecto y otro del director de la institución, Alfonso Palacio.

Según explica Mangado, el proyecto de ampliación volcó sus reflexiones en dos grupos de ideas, las relacionadas con el papel urbano de la nueva construcción y las derivadas de un análisis más íntimo, cuajado de reflexiones personales, de los espacios y el carácter que debía tener un museo de estas características.

"Asumíamos el reto de que la nueva construcción debía hacer compatible un proyecto de contemporaneidad arquitectónica con el hecho de mantener el 'telón' urbano, indiscutible y aceptado por la población, que configuraba esa calle tan importante en la historia de la ciudad".

Tanto Palacio como Mangado se refieren a la necesidad de acometer la segunda fase de las obras para dar unidad al conjunto y solucionar fallos de esta obra.