Pekín, la capital del país que más contamina del mundo, seguía ayer en máximos de contaminación por tercer día consecutivo, lo que mantiene la alerta naranja, la segunda de mayor gravedad tras la roja, con una densa capa de neblina que impedía ver a partir de cierta distancia. Hacia las dos de la tarde, hora local, la concentración de partículas PM 2,5 (las más dañinas para la salud) llegó a los 634 microgramos por metro cúbico, según el medidor de la Embajada de EE UU en Pekín, un nivel ligeramente más bajo que el registrado el lunes, donde hubo máximas de 666 microgramos, cantidad que es casi 27 veces el nivel máximo recomendado por la OMS.

Por otra parte, en Madrid, la alcaldesa, Manuela Carmena, advirtió ayer que es "muy posible" que hoy se restrinja el aparcamiento en el centro de la capital porque los altos índices de contaminación obligarán a activar el escenario dos, más restrictivo que el de ayer.