"Es extraordinario que un periódico reconozca públicamente los méritos de una orquesta y le dé, así, cabida en sus páginas", indicó, al mediodía de ayer, el maestro Rossen Milanov, titular de la Orquesta Sinfónica del Principado de Asturias (OSPA), al recoger los atributos de "Asturiano del mes" de agosto que le concedió LA NUEVA ESPAÑA. El maestro Rossen, búlgaro con un importante desarrollo profesional en EE UU, acudió a la sede del periódico en Oviedo con la gerente de la formación, Ana Mateo, y un grupo de músicos y administrativos de la orquesta para recoger el galardón que se ha ganado la OSPA por su excelencia artística y la gran labor pedagógica que realiza formando al público asturiano.
El director de la Sinfónica asturiana reflexionó sobre los paralelismos que existen entre una orquesta y un periódico y señaló que la música vuela y desaparece en el mismo instante en que se produce, mientras que, "gracias a los periódicos, con sus informaciones y críticas, el trabajo permanece para que pueda ser conocido tiempo después. Gracias al periódico, la música sigue viva después de un concierto".
Abrió la sencilla ceremonia, enmarcada en un vino español que se sirvió en el periódico, la directora de LA NUEVA ESPAÑA, Ángeles Rivero. Mostró el orgullo del periódico por el hecho de que la OSPA hubiese aceptado el premio, que desde 1996 se entrega mes a mes a personas e instituciones que merecen el reconocimiento periodístico y social.
Cultura musical
Además del maestro y de la gerente, por parte de la OSPA acudieron al acto Héctor Corpus, violín; María Espín, viola; Juan Ferriol, oboe; Mirian del Río, arpa; Vanesa Pérez, administrativa; Marta Riaño, intérprete; José Tomás, inspector de la OSPA; Pilar Colunga, administradora; Vicente Mascarell, fagot; Rafael Casanova, percusión, y Roberto Miranda, administrativo.
Por parte del periódico estuvieron con la directora José Luis Rodríguez Artime, director general de Editorial Prensa Ibérica, grupo al que pertenece LA NUEVA ESPAÑA; Eduardo Suárez, gerente del diario, y Melchor Fernández, que fue director.
Ángeles Rivero explicó que el premio se concede a asturianos de nación o adopción que tengan una trayectoria digna de reconocimiento público y que hayan sido noticia en el mes de referencia. El programa de los 25 años de la OSPA, que se cumplen al final de la temporada, en mayo, fue presentado en agosto, lo que ha dado pide a que el galardón tenga esa referencia mensual.
El público asturiano y el ovetense en particular tiene una alta cultura musical, indicó la directora, y es indudable que en este cuarto de siglo la Sinfónica de Asturias ha dejado un gran poso.
Rivero entregó a Milanov el primero de los atributos de "Asturiano del mes": una primera página del periódico en la que se repasa la trayectoria de la orquesta con sus tres directores titulares en un cuarto de siglo, Jesse Levine, Max Valdés y Rossen Milanov, y referencias al concurso de figuras clave, como el concertino Alexander Vasiliev. Melchor Fernández entregó, a su vez, un collage firmado por Pablo García en el que aparecen Milanov y la orquesta. José Luis Rodríguez Artime entregó, finalmente, a Milanov una estatuilla en forma de estela, de Legazpi, que simboliza el premio.
