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La Vida Buena

Una vuelta a Asturias a través de sus belenes

Muchos y distintos son los belenes que hay en toda Asturias, con figuras antiguas, al aire libre o de distintas partes del mundo

Jesús Moreno, ante el nacimiento que instala él mismo, en Pendueles.

Es época navideña y uno de los principales alicientes de estas fechas es visitar los muchos y variopintos belenes que se instalan en Asturias. En Pendueles (Llanes) se encuentra uno de los más originales, no sólo por estar abierto las 24 horas al día (está en el exterior de una casa), sino por los mensajes que intercala su autor, Jesús Moreno, sobre la actualidad. Este año no ha dejado la oportunidad de tirarle de las orejas a la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, a la que critica por su veto a la instalación de nacimientos en la capital.

No hay prohibición en el oriente asturiano, donde la ruta belenística tiene que pasar por obligación por Covadonga, donde cada año aumentan su colección, que destaca por tener conjuntos de todo el mundo. Nápoles, Jerusalén o Suiza son algunos de los lugares de procedencia de las piezas, que comparten protagonismo con los tradicionales, como el de la Santa Cueva, uno de los más visitados.

A punto de cumplir 75 años está el nacimiento que se expone en la iglesia de Lastres, realizado a mano por los hermanos Victorero y que ahora cuidan y miman en la asociación "Astuera". Amanece y oscurece en un conjunto de más de 12 metros cuadrados y que cuenta con figuras de más medio siglo procedentes de Olot, una localidad catalana famosa por su tradición belenística. De momento, sólo se puede visitar por las tardes, de 16.30 a 18.30 horas, y en horario de misas. En el Oriente la ruta no está completa si no se pasa por Villamayor y su belén monumental: este año ampliado con nuevos oficios y que está instalado en el local junto a la oficina de Cajastur.

De Olot también proceden las figuras a tamaño natural del nacimiento al aire libre de Soto del Barco. La sagrada familia no falta cada Navidad en un lateral de la iglesia de San Pedro. Tiene mucha historia detrás el belén sotobarquense, al igual que el de Zardaín (Tineo), con mucho sabor asturiano y unas piezas antiguas halladas en 1988 en un desván (hasta el 7 de enero, en el teleclub).

Hay muchos más en toda Asturias, donde la ruta puede ser interminable. E incompleta si no se pasa por Pola de Siero, donde el nacimiento del asilo de ancianos ha gozado siempre de gran fama.

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