La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

La Vida Buena

La ostra del Eo supera las expectativas fuera y dentro

Madrid se halla a la cabeza de los pedidos y, aunque otros años el País Vasco ocupaba el segundo lugar en cuanto a demanda, el consumo local ha crecido espectacularmente

Ostras del Eo. TANIA CASCUDO

La ostra del Eo tiene cada vez más presencia en las mesas por Navidad. Lo sabe bien Nuria Núñez, de Acueo, que ya ha vendido prácticamente toda la remesa de 20.000 ostras que cada año reservan por estas fechas. De hecho, ayer el contador que tienen en su página web cifraba las restantes en 5.905.

De seguir así el ritmo de ventas, teme que se agoten antes de cerrar la campaña, el próximo 5 de enero. Núñez explica que cada año crecen más las ventas por estas fechas. Madrid está a la cabeza de los pedidos online, pues allí realizan campañas de promoción durante el año y poco a poco son más conocidos. Aunque otros años el País Vasco ocupaba el segundo puesto del ranking, en esta ocasión los de Acueo han recibido un buen número de pedidos de Asturias, para satisfacción de esta empresa familiar, que lleva años volcada en aumentar el consumo local de su ostra del Eo.

Núñez presume, además, de la calidad del producto: "Está estupenda. Es una ostra de invierno que está carnosa". La calidad es algo que preocupa, y mucho, a Acueo, y por eso está tramitando una certificación ecológica para sus ostras.

También la empresa Ostrastur, que retomó la actividad el pasado enero y que desde mayo ya está comercializando ostras desde Castropol, realiza un balance positivo de la campaña navideña. "En estas fechas se triplican las ventas con respecto a una semana normal", explica María Antonia Fernández. Esta firma está más volcada en el mercado nacional, por eso, añade Fernández, la mayor parte de sus ventas se concentran en Madrid, Valencia y Barcelona.

Tanto Acueo como Ostrastur ven con buenos ojos la decisión del Centro de Experimentación Pesquera de Castropol de seguir produciendo semilla de ostra autóctona. La primera campaña se desarrolló en 2012, cuando los técnicos trabajaron a partir de reproductores capturados en la ría de Ribadesella para disponer de semilla. De hecho, las ostras que está comercializando ahora Acueo son fruto de aquella primera campaña, y por eso aplauden que el centro vaya a poner en marcha la segunda en 2016. "Nosotros apostamos por una ostra asturiana cien por cien, que se haga aquí. Asumiendo los costes, por supuesto, no queremos que nos regalen la semilla, pero sí disponer de una que esté controlada, y saber lo que tenemos", precisa Núñez.

Por su parte, María Antonia Fernández considera la iniciativa "muy interesante". "Está muy bien que el Centro de Experimentación pesquera haga cosas relacionadas con la actividad económica más importante de la ría. Nos vendría genial disponer de semilla aquí", precisa.

Compartir el artículo

stats