Leví Star ha hecho un largo e intenso recorrido en su carrera, una carrera que desarrolla en dos campos: el cine y la música. Se crió en Oviedo hasta los 18 años, cuando se fue a "vivir a Londres", desde donde impulsó su carrera. Volvió a España y en seguida comenzó otra aventura, esta vez vía Hollywood. Para empezar, ya tiene en su currículo el haber tocado en la célebre y celebrada sala hollywoodiense Whisky a Go Go. Lo hizo de telonero de Divinity Roxx, artista libre capaz de hacer rebeldías con el bajo y la voz, también de rapear y plasmar un manejo de la escena con soltura y estilo. Cuenta a LA NUEVA ESPAÑA Leví Star que el mismo día que cantó en Whisky a Go Go, horas antes, por la mañana, "Black Sabbath" anunciaba en rueda de prensa su vuelta a las tablas. Es, en fin, una muy intensa aventura sonora en Hollywood, cargada de símbolos.
Leví Star estuvo en noviembre en Asturias para presentar, en el Festival de Cine de Gijón, su nuevo cortometraje, "Pura realidad". Porque el cine es su otro campo artístico, y con resultados de cierta altura. En el festival gijonés presentó el corto tras hacerlo en el Short Film Corner de Cannes. "Pura realidad" está protagonizado por Víctor Anaya y Pablo Argüez: "Su explosiva estética, que se puede apreciar incluso en el póster realizado por el famoso ilustrador Gabriel Moreno, deja la sensación de que se puede ver varias veces para descubrir cosas nuevas", explica Leví Star de su puño y letra.
Este corto fue el "entrante" de lo que será su primer largometraje, "DreamMakers & Banksters", una película que se rodará entre Madrid, Asturias y Barcelona a lo largo de este año. Y que habla de los banqueros malos y los sueños, buenos sueños, de los artistas.
En 2010 comenzó a sacar discos, "maxis", en plataforma digital, con los que hizo una gira por Estados Unidos, a la par que un documental, "Herederos de la revolución". "Me dio para seguir con otras historias, tras conocer a una productora en Hollywood", cuenta. Dice Leví Star que le apasionan el prototipo de músicos que se buscan la vida, que buscan nuevos campos y horizontes. Y ésa es la razón por la que, con el fin de evitar los etiquetados habituales o que, más bien, "te identifiquen en determinado sonidos", ha bautizado su estilo como "dream rock". Y en ese prototipo sonoro, canciones como "Más allá del triunfo de la muerte", "Para entrar en la Leyenda" y "El Blues de Bourbon Street", entre otras producciones de un músico que dio sus primeros pasos en una época de la escena asturiana muy enérgica. Eso sí, relata Leví Star, en su momento les decían a él y a su grupo que sonaban como una banda americana o de Londres, que no es mala tarjeta de presentación.
No obstante, confiesa que tiene sus raíces en el momento en que sus gustos circulaban por el rock, el soul, el blues, el funky?, que tampoco es mala tarjeta de presentación.
