María Moros cosechó en la tarde noche de ayer un gran éxito con la OSPA en el Auditorio de Oviedo interpretando "Lachrymae", de Britten. Moros es la violista principal de la sinfónica asturiana que en esta ocasión estuvo dirigida por el maestro Lorenzo Viotti. El concierto estaba patrocinado por LA NUEVA ESPAÑA. Las diez variaciones del compositor británico fueron abordadas con exquisitos acentos y matices por la solista zaragozana. Destacó especialmente en la variación 5 "Largamente" y en la última de la serie. Muy ovacionada por el público ofreció como propina "Flow my tears" una canción renacentista de Dowland. La velada se abrió con "Tres estudios sobre Cuperin" de Thomas Adès, una pieza muy interesante. En la segunda parte, la Octava de Beethoven que la OSPA, de la mano de Viotti, desarrolló con maestría y vigor.